Autoridades detuvieron a 10 personas y los jóvenes retuvieron a cuatro uniformados
Comité de Padres condena la artera agresión
y exige alto al uso excesivo de la fuerza
Jueves 14 de septiembre de 2017, p. 14
Policías estatales de Guerrero y agentes supuestamente federales habrían disparado contra un autobús en el que viajaban estudiantes de la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa. El incidente derivó en la detención de 10 alumnos, mientras los normalistas capturaron a cuatro policías municipales de Tixtla y una patrulla, con los que negociaron, y obtuvieron, la liberación de sus compañeros.
El Comité de Padres y Madres de Ayotzinapa denunció esta agresión
ayer en un comunicado.
De acuerdo con fuentes oficiales, el operativo se dio después de que los normalistas intentaran apoderarse de una pipa de gasolina y varios camiones repartidores de diferentes mercancías.
El incidente –que ocurrió a 13 días de que se cumplan tres años de la desaparición de 43 estudiantes– comenzó minutos después de las ocho de la mañana, cuando unos 60 estudiantes de segundo grado salieron de su escuela hacia el norte de Chilpancingo, donde retuvieron camiones de empresas trasnacionales para extraerles diésel.
Roberto Álvarez Heredia, vocero del Grupo de Coordinación Guerrero, explicó que los jóvenes se llevaron un camión cisterna con 30 mil litros de combustible por el libramiento a Tixtla hacia la escuela de Ayotzinapa. Esto provocó la movilización de las corporaciones policiacas, que trataron, sin éxito, de alcanzar al vehículo pesado.
Los estudiantes habrían atravesado otra unidad en la carretera para que no los siguieran y abordaron el autobús 1512 de la línea Estrella de Oro, el cual fue alcanzado adelante de Los Túneles, justo en el crucero de la comunidad de Matlalapa, municipio de Tixtla, luego de que, denunciaron los familiares de los jóvenes, agentes dispararan a las llantas.
Álvarez Heredia informó de la detención de 10 estudiantes que se transportaban en el autobús, quienes fueron llevados a las instalaciones de la Fiscalía General del Estado (FGE).
En respuesta, los normalistas que se encontraban en Ayotzinapa salieron hacia Tixtla donde retuvieron a cuatro policías municipales y la patrulla 003 en la que transportaron a los uniformados.
Alrededor de las 13 horas los estudiantes acordaron con Martín Maldonado, subsecretario de Asuntos Políticos del gobierno estatal, entregar a los policías a cambio de la liberación de los 10 normalistas, lo cual se realizó en presencia del presidente de la Comisión de Derechos Humanos del estado de Guerrero (CDHG). Una ves liberados sus compañeros y cuando apareció uno más, los normalistas liberaron a los cuarto uniformados.
Los normalistas aseguraron que fueron baleados por los policías estatales en el crucero de Metlapa, donde se localizaron algunos casquillos tirados; se espera que peritos de la Fiscalía del Estado de Guerrero (FEG) les realicen las pruebas periciales.
Pese a la insistencia del gobierno del estado respecto a que no se utilizaron armas de fuego, peritos de la fiscalía y personal de la CDHG realizaron peritajes en la zona donde inició el incidente.
Álvarez Heredia manifestó que los normalistas eran presuntos responsables de diversos delitos, por poner en riesgo a la población y coartar el libre tránsito. El gobernador Héctor Astudillo Flores dijo desconocer si hubo disparos o personas heridas.
Por su parte, el Comité de Padres condenó la artera agresión a nuestros jóvenes y exigimos un alto a la represión y criminalización de Ayotzinapa, alto al uso excesivo de la fuerza contra nuestros compañeros y al uso de armas en manifestaciones públicas
.
Demandaron una investigación de estos hechos y contra los policías que habrían disparado y a sus mandos.