La propuesta de presupuesto para la igualdad entre hombres y mujeres en 2018 no sólo es insuficiente, sino también permite la falta de una política integral con acciones coordinadas que realmente respondan a disminuir las brechas de desigualdad, coincidieron activistas.

Alma Colín, de la organización Equidad de Género: ciudadanía, trabajo y familia, señaló que la gran apuesta, más que pelear con una ampliación del presupuesto, es porque se haga transversal, que sí se cumplan los principios.

En entrevista indicó que los programas de todas las dependencias no atienden la igualdad. Se quedan en el asistencialismo, en el mejor de los casos, porque en otros mantienen brechas de desigualdad e incluso las profundizan, y eso es producto de una falta de análisis serio, comprometido entre varias secretarías que quieran erradicar o disminuir una separación concreta y que no se quede con la acción aislada.

La especialista agregó que más de 99 por ciento de las acciones del gobierno siguen sin tener una perspectiva clara de igualdad y género.

Magaly Reyes, activista e integrante del Consejo Social de Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), expuso que ante el contexto de violencia que se vive en el país, el presupuesto asignado no responde a las necesidades. Mencionó que dentro del Presupuesto de Egresos de la Federación 2018 se vuelven a repetir las mismas fórmulas y entonces se presenta un aumento discriminatorio, al no tomar en cuenta la magnitud del problema, por minimizar el problema al cual nos enfrentamos.

Aunque el prespuesto pasaría de más de 26 mil 761 millones a 28 mil 93 millones, señaló que esto no es significativo a escala global, por lo que es totalmente insuficiente, pero, además, la estructura que tiene el anexo por la igualdad no permite influir positivamente en la disminución de la discriminación de las mujeres y el acceso a una vida libre de violencia.