La ampliación de escuelas en la zona fue común desde hace 10 años, señalan
Miércoles 27 de septiembre de 2017, p. 6
Vecinos del Colegio Enrique Rébsamen dan cuenta de las obras con las cuales poco a poco se amplió la escuela que operaba desde 1983, cuando el edificio colapsado sólo tenía dos pisos de construcción.
Sin embargo, afirman, en esta colonia la ampliación y remodelación de colegios particulares fue algo común, al menos en los 10 años recientes.
Ahora, agregan, exigen no sólo que se investigue y sancione a la propietaria del colegio, sino también a las autoridades que no llevaron a cabo las revisiones correspondientes de manera oportuna.
¿Cómo vamos a estar seguros de que no tenemos irregularidades en las escuelas de la zona? Ya vimos que nos pegó fuerte el temblor. Nos tienen que garantizar que no va a ocurrir de nuevo
, pidió un locatario de avenida División del Norte, cuyos hijos acudían a una escuela que se encuentra en la esquina de la zona afectada.
En un pequeño restaurante ubicado en la esquina, narra el encargado, veían el crecimiento del colegio y de dos escuelas cercanas como signo de que la zona estaba mejorando.
Los clientes no faltaban y el movimiento a la hora de entrada y salida de los planteles aumentaba el flujo de gente en la zona.
Sin embargo, no a todos los vecinos les parecía buena idea. Los que estábamos cerca sufrimos ruido y aglomeración por la entrada de material de construcción. Nos quejamos varias veces, pero las remodelaciones fueron constantes en los años recientes
, explicó una mujer que vive en la misma calle donde se ubica el colegio que colapsó.
Tenemos la zona parada, derruida, sin comercio y sin clases. Esto va para largo
, lamentó Isabel, vecina del lugar.
Así, conforme pasan los días, en la zona cada vez quedan menos elementos del Ejército y la Marina.
Ayer sólo se veía a unos 50 uniformados que resguardaban las inmediaciones del Colegio Enrique Rébsamen.
Por la tarde, el material de construcción que se utilizó para reforzar la zona colapsada, como polines y varillas, fue sacado del lugar, mientras peritos de la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México inspeccionaban la zona.