En medio de un escándalo y acusaciones sobre posible fraude durante el conteo de votos, el Senado eligió ayer a Gabriel Contreras para un nuevo periodo de cuatro años como presidente del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT).

Fue electo por 81 votos en favor, de un total de 112 senadores presentes –ya que 27 fueron para la comisionada María Elena Estavillo y cuatro nulos– pero luego de un hecho inédito que obligó a declarar un receso de la sesión de casi una hora.

El presidente del Senado, Ernesto Cordero, se vio forzado a pedir el video de la votación y del conteo de votos para revisarlos, luego de que la senadora del PAN, Marcela Torres Peimbert, acusó a gritos que personal de Asuntos Parlamentarios pasó papeletas adicionales al senador del PVEM, Gerardo Flores, quien participaba en el conteo y a quien se vincula con las televisoras.

La panista Peimbert pidió que se repusiera el proceso de votación, pero Cordero advirtió que no repetiría la votación y llamó a la calma en varias ocasiones. Aquí hay un señalamiento muy serio, lo menos que podemos hacer es no agravar la situación, recalcó, y pidió el receso.

Tras la revisión de los videos, el coordinador del PAN, Fernando Herrera, dijo que estaban de acuerdo con el resultado de la votación, pero advirtió: tenemos que mejorar todos los procesos de elección, ya que se pueden provocar confusiones. Contreras rindió protesta ante el pleno senatorial.

La elección del presidente del IFT se complicó desde la mañana, ya que de los cinco comisionados contendientes, el PRI y sus aliados del PVEM, así como algunos panistas, se habían decidido por Gabriel Contreras, quien recién concluyó un primer periodo de cuatro años al frente del instituto, con cuestionamientos por su respaldo a la televisora de Emilio Azcárraga.

Sin embargo, durante su reunión plenaria, el PAN se manifestó por María Elena Estavillo Flores y lo mismo hizo el PRD y parte del PT-Morena.

Durante el debate en tribuna, el presidente de la Comisión de Radio, Televisión y Cinematografía, Zoé Robledo, advirtió que la autonomía no debe confundirse con opacidad y dijo que el IFT tiene aún una larga lista de pendientes que resolver: debe emitir los lineamientos de publicidad, tiene que resolver la concentración de Telmex y Dish, así como la tarifa cero, entre otros.

La también senadora del PT- Morena Dolores Padierna subrayó que la comisionada María Elena Estavillo es quien garantiza el margen de independencia y pluralidad en el IFT. Gabriel Contreras como presidente mantuvo una posición muy tibia sobre los excesos de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes se mostró favorable a Televisa y a América Móvil.

Igualmente, la perredista Angélica de la Peña dijo que la autonomía de instituto no se garantiza con Gabriel Contreras, pero el PRI y el PVEM le aseguraron la presidencia”. Coincidió en que la comisionada Estavillo era la mejor candidata, ya que representaba independencia y autonomía.

El petista Benjamín Robles acusó: el IFT ha incumplido en todo para lo que fue creado. Ha caído por su propio peso, cuando comprobamos que ha sido precisamente la falta de independencia su talón de Aquiles. Televisa sigue siendo dominante en televisión de paga y Telcel en comunicaciones.

Por otra parte, el coordinador del PT-Morena, Manuel Bartlett, se confrontó con el presidente de la Comisión de Energía, Salvador Vega Casillas, a quien acusó de ser responsable de haber dejado en manos del presidente Enrique Peña Nieto la decisión de nombrar a tres comisionados de órganos reguladores del sector energético, por romper el quórum en la sesión del pasado jueves.

Vega Casillas es un cobarde, que ni siquiera dio la cara, pese a que se lo pedimos infinidad de ocasiones, resaltó Bartlett. Envió una carta al presidente del Senado, Ernesto Cordero, donde advierte de las muchas irregularidades que se dieron en el proceso para elegir a dos comisionados de la Comisión Reguladora de Energía y uno de la Comisión Nacional de Hidrocarburos.