La ICAN ha sido una fuerza para estigmatizar, prohibir y eliminar
este armamento
Beatrice Fihn, directora de la campaña, advierte a EU y Corea del Norte: tienen que parar
No queremos dar una patada a nadie, sino llamar la atención sobre un gravísimo problema, dice
Sábado 7 de octubre de 2017, p. 28
Oslo.
Por su trabajo para llamar la atención sobre las catastróficas consecuencias humanitarias de cualquier uso de armas nucleares
y lograr que las leyes internacionales prohíban
este tipo de artefactos, La Campaña Internacional para la Abolición de las Armas Nucleares (ICAN, por sus siglas en inglés) fue condecorada este viernes con el Premio Nobel de la Paz 2017.
Constituida oficialmente en 2007 en Viena, la ICAN es una coalición de 468 organizaciones no gubernamentales provenientes de 101 países que trabajan en el mundo por la supresión del armamento nuclear mediante tratados internacionales.
Berit Reiss-Andersen, presidenta del comité del Nobel, enfatizó, al anunciar el galardón, que el grupo ha sido una fuerza de la sociedad civil para conseguir que las naciones del mundo prometan cooperar en los esfuerzos de estigmatizar, prohibir y eliminar las armas nucleares
.
Mandó un mensaje a las potencias nucleares para iniciar negociaciones serias
destinadas a eliminar su equipo de destrucción masivo debido a que algunos países modernizan sus arsenales, y es real el riesgo de que cada vez más naciones se procuren con este tipo de armas, como Corea del Norte
.
Vivimos en un mundo donde el riesgo de utilizar armas nucleares es más alto de lo que nunca fue. Los pueblos del mundo no quieren ser defendidos con este tipo de estrategias, alertó.
No queremos dar una patada a nadie, sino llamar la atención sobre un gravísimo problema.
El premio, dotado con 1.1 millones de dólares, se dio en medio de crecientes tensiones por el desarrollo de armas atómicas en Corea del Norte, lo que ha generado tensiones internacionales, y en momentos en que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, certificará ante el Congreso si Irán respeta los compromisos sobre energía atómica pactados en el acuerdo de Viena, antes del 15 de octubre.
En su primera reacción, Beatrice Fihn, directora de la ICAN, criticó desde su sede central en Ginebra, Suiza, al mandatario estadunidense al asegurar que su elección incomodó a mucha gente por el hecho de que pueda autorizar por sí solo el uso de las armas nucleares
.
Fihn aclaró a Trump y al líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, quienes han creado un entorno de tensión internacional a raíz de las pruebas de misiles atómicos norcoreanas, que tener, poseer o desarrollar armas nucleares es ilegal
y advirtió que tienen que parar
.
Aseguró que el Nobel de la Paz envía un mensaje a todos los estados con armas nucleares y a todos los estados que contribuyen a la dependencia de las armas atómicas en materia de seguridad de que este es un comportamiento inaceptable
.
Al recibir el anuncio del galardón , Fihn, de 34 años, pensó que era una broma
, pero lo creyó minutos después, cuando oyó el nombre del grupo en televisión.
El mayor éxito de la ICAN fue la campaña a favor del Tratado de Prohibición de Armas Nucleares, adoptado por 122 países en la Organización de Naciones Unidas en julio pasado. El 20 de septiembre, el primer día que el pacto estuvo abierto para su firma, 51 países lo rubricaron y tres entregaron sus ratificaciones. El acuerdo requiere 50 ratificaciones para entrar en vigor y la ICAN confía en lograrlo.
El alcance es simbólico porque nueve potencias nucleares: Estados Unidos, Rusia, Reino Unido, Francia, China, India, Pakistán, Israel y Corea del Norte, que suman unas 15 mil armas nucleares, boicotearon el texto o no votaron por él.
La ICAN organizó encuentros a nivel global en 2015 para conmemorar los 70 años del devastador uso de la bomba atómica estadunidense contra las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki durante la Segunda Guerra Mundial (1939-1945).
La coalición está constituida principalmente por jóvenes activistas, pero ha sumado el apoyo de defensores y personalidades influyentes, como el Nobel de la Paz sudafricano Desmond Tutu, el músico de jazz Herbie Hancock o el Dalai Lama, entre otros.
El número de candidatos para la edición 114 del Nobel de la Paz, fue de 318 seleccionados. Los expertos pronosticaron un Nobel de la Paz relacionado con la lucha contra las armas nucleares, pero para la ICAN fue inesperado recibirlo. El ganador del Nobel de la Paz del año pasado fue el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, por su esfuerzo para acabar con los 50 años de guerra civil con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia.