El Cairo.

El movimiento islamita Hamas y su rival palestino Fatah firmaron este jueves en la capital egipcia un acuerdo de reconciliación para poner fin a una década de luchas intestinas, fijando un plazo de dos meses para resolver divergencias

Ambas partes acordaron permitir a la Autoridad Nacional Palestina (ANP) que lleve a cabo su trabajo y asuma su plena responsabilidad a la hora de dirigir la franja de Gaza, como ocurre en Cisjordania, antes del primero de diciembre de 2017, señalaron en un comunicado autoridades egipcias, quienes supervisaron las negociaciones.

El pacto fue suscrito en El Cairo por el líder de la delegación de Fatah, Azzam al Ahmad, y el vicepresidente del buró político de Hamas, Saleh al Arouiri, en presencia del jefe de la inteligencia egipcia, Jaled Fawzy.

Fatah y Hamas pretenden solucionar sus desacuerdos (las armas de Hamas o el control de la seguridad en Gaza), y celebrarán una nueva reunión en El Cairo el 21 de noviembre.

El presidente de la ANP, Mahmoud Abbas, saludó el acuerdo final para poner fin a las divisiones, particularmente para los 2 millones de gazatíes, agotados por tres guerras con Israel desde 2008, el bloqueo israelí y egipcio y la pobreza.

Hamas, que ganó las elecciones legislativas en 2006, pero no pudo gobernar por presiones internacionales, expulsó entonces a Fatah de la franja de Gaza.

La ANP, dominada por el partido moderado de Fatah, ejerce un poder limitado en Cisjordania, ocupada por Israel y ubicada a decenas de kilómetros de distancia de Gaza.

El acuerdo de reconciliación prevé el despliegue de 3 mil policías de la ANP en Gaza y en las fronteras con Israel y Egipto, reveló un alto funcionario implicado en las conversaciones.

La Organización de las Naciones Unidas felicitó a Abbas por el acuerdo, mientras la Liga Árabe indicó que ese rencuentro representa una garantía esencial para las aspiraciones del pueblo palestino.

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, advirtió en Facebook: Israel se opone a cualquier forma de reconciliación en la que la organización terrorista de Hamas no entregue las armas y no cese su combate para destruir a Israel, y añadió: la reconciliación entre Fatah y Hamas sólo dificulta mucho más la búsqueda de la paz.