Buenos Aires.

El país está en una situación de suspenso ante la aparición el mediodía de este martes de un cuerpo en el Río Chubut, a unos 300 metros de donde la Gendarmería reprimió a un grupo de mapuches el pasado 1 de agosto, cuando desapareció el joven Santiago Maldonado en esa provincia sureña, y en l noche aún no se tenían noticias sobre la identificación del cadáver mientras se espera la llegada del Equipo Argentino de Antropología Forense.

La tensión aumenta a más de 70 días de la desaparición del joven que acompañaba a siete mapuches del Pu Lof de Resistencia Cushamen, en Esquel, cuando la Gendarmería avanzó con armas y piedras y los persiguió hasta el borde del río, donde los mapuches lo cruzaron y vieron que los efectivos detenían a Santiago, y luego los vieron cargar un cuerpo en un vehículo de la misma gendarmería, que disparó con balas de goma y plomo.

Lo más grave son las declaraciones del gobierno y especialmente de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, quien primero negó la actuación de la gendarmería, que después tuvo que admitir, y luego todo este tiempo el gobierno realizó una serie de operaciones de distracción, con los medios masivos de comunicación, que sembraban pistas falsas.

Hace sólo tres días, la candidata de la oficialista alianza Cambiemos, Elisa Carrió, en esta capital, dijo en un debate electoral que había el 20 por ciento de posibilidades que Maldonado estuviera en Chile.

La conducta del gobierno y las operaciones de sus servicios de inteligencia y las pistas falsas plantadas por esos medios de comunicación, han creado un clima que ha sido denunciado en marchas y movilizaciones multitudinarias por organismos de derechos humanos y diversos sectores de la sociedad que clama diariamente ¿dónde está Santiago Maldonado?, una pregunta que ya ha ganado un lugar en el mundo.

Lo más grave es que el gobierno violentamente allanó con fuerzas de seguridad estilo grupos especiales comunidades mapuches, que sufrieron todo tipo de maltrato e investigaron a la familia de la víctima, que está al frente de los pedidos de la aparición con vida del joven artesano, solidario con los pueblos originarios, a los que les han quitado sus territorios vendidos a grandes compañías transnacionales en la Patagonia.

Si el cuerpo es de Maldonado, habría sido sembrado, ya que el lugar fue rastrillado por más de 300 buzos tácticos tres veces en los últimos tiempos y de repente un aviso al nuevo juez a cargo de la investigación, Guillermo Gustavo Lleral, sostuvo que había un cadáver entre las ramas en ese río.

Como si esto no fuera suficiente este día los abogados de la dirigente social Milagro Sala, solicitaron un hábeas corpus en su favor ante la Corte Suprema de Jujuy, negada por los jueces después de que esta fuera secuestrada violentamente por un grupo de policías, con pasamontañas y llevada en un automóvil sin placas desde la casa -que no era la suya- donde se supone la mantenían en prisión domiciliaria altamente vigilada, a la cárcel de Comedero. La decisión la tomó el juzgado a cargo asociado al gobierno de Gerardo Morales, que persigue tanto a Sala, como al movimiento Tupac Amaru que ella dirige, con el visto bueno del gobierno nacional.

La prisión domiciliara fue exigida por la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) que ahora advierte sobre medidas que se tomarán por el incumplimiento de sus resoluciones.

Abundan en estas horas las denuncias sobre avances totalitarios de la administración de Mauricio Macri, que a cinco días de las elecciones legislativas del próximo domingo 22 ha logrado que la justicia, con magistrados ligados a su gobierno, solicite llevar a la cárcel y desaforar al diputado Julio de Vido, ex ministro clave del gobierno de la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner, cuando ni siquiera ha sido juzgado.

Es más que evidente que es una acción de campaña del gobierno de Macri denuncian los opositores aquí después que Macri en un acto de cierre de campaña oficialista celebró el pedido de detención de De Vido, y amenazó a dirigentes opositores. Hemos empezado a echarlos del país, es un largo camino pero vamos muy bien. No vamos a parar. Y ojo con aquellos que son cómplices de lo que sucedió la década pasada. Ojo con aquellos que creen que desde la política, la justicia, el empresariado y sindicalismo pueden ser socios. Van a terminar como los narcos, todos presos, dijo desafiante Macri.

En la mañana debió comparecer a pesar de estar atendido por un problema de salud, el ex canciller Héctor Timerman, quien se presentó ante el juez Claudio Bonadío, que lo citó a declarar en la causa por una supuesta traición a la patria a partir de la firma del Memorándum de Entendimiento con Irán para intentar avanzar con el esclarecimiento del atentado a la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA, 1994) en los años 90. Curiosamente Bonadío, un juez que tiene unas 200 denuncias en su contra y ahora está al frente de todas las causas abiertas por el macrismo fue apartado de la causa del atentado a la AMIA , por las irregularidades y encubrimientos de este magistrado.

El ex canciller Timerman se descompensó después de entregar su declaración escrita y fue trasladado de urgencia a la Unidad Coronaria del Sanatorio Otamendi, en esta capital, mientras su abogada, Graciana Peñafort, consideró que fue una tortura y una crueldad obligarlo a presentarse enfermo, después de haber pedido una prórroga por su situación.

La de hoy fue la primera de las 14 declaraciones indagatorias convocadas por Bonadio para la recta final de la campaña. Son en el marco de la causa paralela impulsada para mantener en vigencia la denuncia hecha por Alberto Nisman antes de morir (enero de 2015) por el supuesto encubrimiento del ataque a la mutual judía AMIA. La ronda de declaraciones culminará el 26 de octubre, para cuando fue citada la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner, que podría llegar a los tribunales sólo 96 horas después de ser electa senadora, señala Página 12.