Ciudad Victoria, Tamps.

Raymundo Serrano Nolasco, juez de distrito con sede en esta capital, ordenó la detención con efectos de extradición del ex gobernador Eugenio Hernández Flores y de su cuñado Óscar Gómez Guerra, quienes son requeridos por la corte federal del distrito sur de Texas por sobrepagos a contratistas resultado de sobornos, y por hurtar 300 millones de pesos al gobierno de Tamaulipas mediante contratos falsos.

El juzgador emitió en la resolución, con fecha 17 de octubre de 2017, la orden de detención provisional con fines de extradición contra Hernández Flores y Gómez Guerra, además de que autorizó el aseguramiento de bienes y documentos que los imputados tuvieran en su poder debido a que habrían establecido empresas inexistentes (fantasmas).

La causa 1/2017, en la que el juez basó su resolución, indica que es procedente la extradición, y se acota que Hernández Flores es requerido por los presuntos delitos de asociación delictuosa, lavado de dinero, operar negocios de envío de dinero sin licencia y fraude bancario.

El juez sustentó la resolución en el artículo 2 numeral 1 del tratado de extradición entre México y Estados Unidos, cláusulas 12, 20 y 23, por lo que consideró procedente el procedimiento para ordenar la detención provisional con fines de enviar al ex mandatario estatal fuera del país.

En el documento se hace alusión a la nota diplomática 17-3953 del 11 de octubre anterior, suscrita por William H. Duncan, ministro consejero de la embajada de Estados Unidos en México, debido a que Eugenio Hernández está indiciado en los procesos penales C-14-178-SS, 214CR178SS y 214CR-178 desde el 8 de febrero pasado, cuando se libró una orden de aprehensión en su contra en el país vecino.

Duncan solicitó a la Procuraduría General de la República que proceda a la detención del ex gobernador y no lo recluya en una cárcel federal, para dar cumplimiento al tratado de extradición entre México y Estados Unidos.

Hernández Flores se desempeñó como diputado federal y presidente municipal de Ciudad Victoria entre 2000 y 2004. Fue gobernador de Tamaulipas de 2005 a 2010, y en el último año de su administración fue acribillado el ex candidato priísta a la gubernatura, Rodolfo Torre Cantú.

La Policía de Investigación lo detuvo el 6 de octubre anterior a petición de la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción, y está en prisión preventiva acusado de apropiarse en 2007 de mil 600 hectáreas del puerto industrial de Altamira.