Hija y nieto del homenajeado acuden al Museo de El Carmen
La obra de mi padre, todavía poco estudiada, no es reconocida
, dijo la pintora Carmen Parra en entrevista con La Jornada
Sábado 28 de octubre de 2017, p. 6
El arquitecto, pintor, escultor y escenógrafo de películas de la llamada época de oro del cine nacional, Manuel Parra (1911-1997), es recordado en un altar de muertos dedicado a su persona, obra y mundo, montado en el Museo de El Carmen.
Esa instalación de unos cinco por 12 metros fue dada a conocer en un acto encabezado por Alfredo Marín, director del recinto, Carmen Parra, hija del homenajeado, y su nieto Emiliano Gironella Parra.
Cada año ese recinto dedica su tradicional altar de muertos a algún sanangelino distinguido
. Alguien que haya vivido allí y hecho algo relevante por la zona. Para Alfredo Marín, San Ángel, sin la arquitectura de Manuel Parra, sería medio raro porque es un arquitecto medio especial que, por desgracia, es poco conocido
.
En entrevista con La Jornada, Carmen Parra acotó que su padre, además de construir muchas casas en San Ángel, restauró una de las capillas de la iglesia de El Carmen y en el atrio construyó las capillas posas. Dijo encontrar conmovedor regresar a este lugar donde mi papá me traía de niña todo el tiempo
.
Se trata del primer acto público que le hacen a don Manuel a quien describe su hija como un artista muy anarquista que nunca quiso homenajes, ni libros ni nada; entonces su obra no está reconocida y es muy poco estudiada
. Para la también pintora el altar representa la recuperación de un arquitecto que fue fundamental en un momento de la historia de México
.
Según Emiliano Gironella Parra, aparte del significado del altar dentro de las tradiciones mexicanas religiosas y familiares, es el primer homenaje que la nación le da a mi abuelo
, porque hasta el momento la familia siempre había promovido la obra de este personaje, quien también restauró el San Ángel Inn y el Bazar del Sábado.
El diseño del altar estuvo a cargo del restaurador Alfredo Marín, quien reconoció su gusto por lo barroco. Para su realización se contó con el apoyo de la familia, pues facilitó muebles, fotografías y artículos personales, incluso dibujos de Manuel Parra, con la finalidad de recrear varios rincones de la casa del artista, como su taller y una pequeña sala.
Objetos de papel maché, cartonería, flores y pétalos de cempasúchil, velas escamadas, papel picado, pan de muerto, calaveritas de dulce, esferas, pinturas coloniales y partes de columnas pertenecientes al acervo del Museo de El Carmen, fueron utilizados en el montaje. No obstante, no cupo todo lo deseado por el director del recinto.
En medio del conjunto, y sobre un gran espejo, destaca una fotografía del homenajeado. Abajo yace su máscara mortuoria. Antes de entrar al cuarto que alberga el altar se ha montado una pequeña exposición de figuras de cartonería hechas por Martín Alberto y Sandra Rodríguez. Ambos artesanos también fabricaron una calaca con la figura de don Manuel con todo y su parche en el ojo derecho.
Presente en el acto inaugural, la escritora María Luisa La China Mendoza, amiga de la familia Parra, dijo que la arquitectura del homenajeado evoca un México que hemos perdido, por desgracia, un México de señorío y distinción
.
El altar de muertos dedicado al arquitecto Manuel Parra permanecerá abierto al público tres semanas en el museo ubicado en avenida Revolución 4 y 6, colonia San Ángel.