Madrid

La declaración unilateral de independencia provocó numerosas reacciones en los partidos políticos del Estado español. La mayoría, aunque con matices, expresaron su rechazo, al insistir en que es una decisión que no está amparada por la ley y que además aumenta la fractura en la sociedad catalana.

Desde Madrid, el secretario general del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) y principal líder de la oposición, Pedro Sánchez, confirmó su respaldo al gobierno de Mariano Rajoy en la suspensión de la autonomía para defender la integridad del territorio español.

Sánchez lamentó que finalmente no se haya encontrado una vía de diálogo para encontrar una salida al conflicto. La unión fraternal entre compatriotas prevalecerá. Cataluña seguirá siendo España porque hay vínculos mucho más poderosos que prevalecerán sobre el absurdo de quienes no son leales a todo su pueblo. Ni España se concibe sin Cataluña ni viceversa. La España sin Cataluña sería un Estado mutilado, afirmó.

El PSOE votó en favor de la intervención del Estado en Cataluña, y sus senadores –salvo el ex presidente de la Generalitat, José Montilla, y el ex dirigente balear Francesc Antic– se pronunciaron en favor de las medidas al amparo del artículo 155 de la Constitución.

Por su parte, el líder de Unidos Podemos, Pablo Iglesias, criticó con igual dureza la declaración unilateral de los independentistas, que la decisión del presidente Rajoy de aplicar las medidas de excepción. Estamos tristes. No había derecho a la declaración que hemos visto hoy. Pero nosotros tampoco vamos a apoyar las medidas represivas que pretende llevar a cabo el gobierno de Rajoy.

El líder de Ciudadanos, Albert Rivera, reconoció su satisfacción con la convocatoria de elecciones anticipadas y con la aplicación del artículo 155, pues, a su juicio, hoy se ha producido una rebelión en Cataluña, donde 70 personas pretenden romper España y la convivencia para siempre en el país. Esa declaración tendrá como respuesta más democracia, la de la Constitución y del artículo 155. Propondremos a los catalanes una salida democrática y un nuevo Parlamento en el que vuelvan los diálogos, los consensos y que se hable de los problemas de Cataluña.

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, también criticó tanto las medidas adoptadas por Rajoy como la declaración unilateral.

Rajoy lo ha presentado entre los aplausos de los suyos, para vergüenza de todos los que respetamos la dignidad y la democracia. ¿Aplaudían su fracaso? Somos mayoría, en Cataluña y en España, quienes queríamos que pararan las máquinas, que se hubiera impuesto el diálogo, la sensatez y una solución acordada.

El Partido Nacionalista Vasco, que hizo de mediador en esta crisis, exigió respeto a las instituciones catalanas, con lo que se abre una etapa que demanda democracia y responsabilidad.

Desde la formación abertzale EH Bildu se vanagloriaron con la llegada de la nueva república catalana , que a su juicio se basa en la libre voluntad de la ciudadanía.