Domingo 29 de octubre de 2017, p. a16
La ciudad de Nápoles, el reino de la camorra, es el escenario donde se desarrolla La banda de los niños, novela de Roberto Saviano.
El periodista y escritor italiano ofrece a los lectores una historia de cómo el dinero transforma a los niños en asesinos y traficantes. Son pequeños de clase media sin miedo, que se enfrentan a los clanes más poderosos de esa urbe italiana.
El autor de Gomorra, Vente conmigo y CeroCeroCero, en su obra más reciente, con personajes ficticios inspirados en la realidad que rodea a la mafia italiana, narra la historia de cómo Nicolas y su grupo de amigos se convierten en despiados reyes de las plazas de la droga.
Cegados por el poder, el dinero y sobre todo por ser parte de ese mundo de las grandes mafias, Nicolas y sus amigos comienzan a trabajar para Copacabana, el jefe de zona de la familia Striano.
Los adolescentes tenían muy claro lo que deseaban y no era precisamente trabajar para alguien, pues a ellos les interesaba hacer dinero, poseer automóviles, trajes y relojes costosos, ser deseados por las mujeres y envidiados por los hombres.
El líder de los jóvenes, Nicolas, soñaba con una vida de aventuras y riqueza, tenía claro que si quería dinero rápido también iba a morir joven y ese era el riesgo que estaba dispuesto a correr por tener una existencia llena de lujos.
Nicolas había nacido en el bajo Nápoles, sabía que si quería respeto lo debía conquistar, y que en la vida sólo había dos categorías: los fuertes y los débiles.
Mediante el protagonista, Saviano describe cómo en la actualidad son los jóvenes los que se han adueñado de las plazas de la droga.
Para escribir la novela, el autor se inspiró en hechos reales, como es el caso de unos jóvenes que fueron investigados por los fiscales antimafia Henry Woodcok y Francesco de Falco, asunto que concluyó con 43 condenas.
Además, desde las primeras páginas Roberto Saviano comparte lo que piensa Nicolas Fiorillo, joven de 16 años, a quien no le importa morir y tiene claro que en el Sistema no hay amigos ni lealtades.
El protagonista sabe que en la vida o se es jodido o jodedor y él quiere ser de los segundos, un jodedor que puede incluso no tener el poder, pero sabe usar, comprar o incluso ignorar las leyes.
Fiorillo y sus amigos Pichafloja, Dientecito, Estabadicendo, Briato, Dragón y Bizcochito comenzaron a trabajar para Copacabana vendiendo droga para amigos en la escuela; ese era el primer paso para estar dentro del Sistema.
Los adolescentes que han formado la banda liderada por Nicolas no tienen miedo a la muerte ni a la cárcel, pues saben que la única posibilidad que se tiene es jugarse la vida.
En esta historia de lucha territorial, el joven Fiorillo no quiere perder tiempo y por eso aprovecha que los grandes capos están en la cárcel o en sus búnker y no en las calles, como antes.
Nicolas quiere todo y de inmediato cree que él y su banda son la solución. Los chicos comienzan a abrirse camino mediante amenazas y también asesinan a los que les estorban en su brega por ser los dueños en el barrio de Forcella, en el centro histórico de Nápoles.
Finalmente Nicolas conquista su propia zona, donde puede vender droga, extorsionar y cobrar para convertirse en un jugador más del Sistema.
En italiano, el título del libro es La paranza dei bambi y paranza en esa lengua es el nombre de una embarcación usada para la pesca de arrastre y que emplea una luz y en la novela de Roberto Saviano los adolescentes son como peces que terminan arrastrados y engañados por una luz. Los chicos matan y son asesinados, por dinero, identidad y poder.
En la novela La banda de los niños, el poder se afianza ganándose el respeto, sembrando miedo y ejerciendo la violencia. Un link en el Facebook de la novia de otro puede convertirse en una sentencia de muerte, y si hay que probar armas nuevas, se utiliza como blanco a un grupo de inmigrantes.
Los chicos de esta nueva banda en territorio napolitano juran con sangre, ejecutan a sangre fría y se traicionan entre ellos.
A los niños que retrata el autor en la novela sólo les interesa el dinero y para ellos la vida no es un regalo, sino algo que necesitan asir a diario. Antes en la mafia italiana había menores como mozos o recaderos, ahora son ello los que mandan y algunos tienen gran talento para intimidar y controlar las plazas de la droga.
Los jóvenes en el libro de Saviano, para apoderarse de calles y plazas, consiguen armamento de guerra y a sus 16 años disponen de un territorio para abrir y ocupar una zona donde venden drogas.
La novela describe la podredumbre cotidiana de una ciudad corrompida, corroída, en la que la sangre se paga con sangre y el destino está escrito en forma de reformatorio, cárcel o tumba.
Saviano, autor del bestseller internacional Gomorra, desde 2006 vive con escolta, debido a las amenazas de muerte de los clanes mafiosos a los que denunció.
Título: La banda de los niños
Autor: Roberto Saviano
Traducción: Juan Carlos
Gentile Vitale
Editorial: Anagrama
Número de páginas: 377
