Chilpancingo, Gro.

Siete menores de edad, quienes junto con 42 adultos forman parte de la Policía Ciudadana de Mezcala, municipio de Eduardo Neri, fueron liberados la noche del sábado y entregados a sus padres, luego de haber sido aprehendidos por fuerzas federales y estatales el jueves pasado en las inmediaciones de esa comunidad minera.

El vocero del Grupo de Coordinación Guerrero, Roberto Álvarez Heredia, informó que el juez especializado en justicia penal del Centro de Ejecución de Medidas para Adolescentes, dependiente de la Procuraduría General de la República, les concedió la libertad asistida. En tanto, los adultos siguen bajo proceso.

El pasado 26 de octubre agentes estatales, federales y soldados detuvieron a los 49 policías ciudadanos, algunos en posesión de armas de uso militar exclusivo, presuntamente porque trataron de llevarse a un estudiante de secundaria.

En ese contexto, la mañana de ayer unas 500 personas, entre ellas policías ciudadanos y sus familias, provenientes de varios pueblos, realizaron en la cabecera municipal de Heliodoro Castillo la marcha por la paz y la seguridad de los pueblos de la sierra para demandar la libertad de sus vecinos de Eduardo Neri.

Al grito de ¡fuera gobierno!, ¡fuera policías estatales!, los contingentes también exigieron la salida del Ejército y de las policías estatal y federal, a las que acusan de no acabar con la delincuencia en esa zona de la Sierra Madre del Sur.

Representantes de los policías ciudadanos explicaron que habitantes de Eduardo Neri y Heliodoro Castillo formaron hace seis meses esa corporación para tener seguridad.

Antes, dijo uno de los manifestantes, “en esta zona no había maestros ni médicos y en algunas partes (los delincuentes) no dejaban pasar diversos servicios; por eso exigimos al gobernador (el priísta Héctor Astudillo) seguridad para caminar libremente de Tlacotepec a Chilpancingo

Hay lugares como Filo de Caballos donde los bandidos no dejan pasar a los doctores ni a los enfermos. Muchos han fallecido por falta de atención médica.

Otro expuso que el gobernador no sólo debe apoyar a un bando; queremos que arregle las cosas. En Heliodoro Castillo somos pacíficos. No sabemos por qué el gobierno nos manda tanto soldado. Aquí lo único que pedimos es seguridad para nuestros pueblos, expresó.

Con la Policía Ciudadana, sostuvo, se han evitado robos, matanzas. Todo eso lo estamos erradicando. Aquí somos voluntarios, nadie está a la fuerza, no hay sueldos, somos nombrados por pueblos, barrios y colonias, explicó.

Añadió: Si hay diferencias entre grupos que las arreglen ellos, y si el gobernador no puede (con la inseguridad), nosotros como comunitarios buscaremos la solución.