Martes 28 de noviembre de 2017, p. 2
Madrid. Un estudio realizado por investigadores de Loma Linda University Health (Estados Unidos) puso de manifiesto que comer frutos secos de forma habitual fortalece las frecuencias de ondas cerebrales asociadas con la cognición, el aprendizaje, la memoria y otras funciones claves de ese órgano. Para llegar a esta conclusión, publicada en el FASEB Journal, tomaron electroencefalogramas de los participantes para medir la fuerza de las señales de las ondas cerebrales. La actividad se registró posteriormente en nueve regiones del cuero cabelludo asociadas con la función cortical cerebral.