Miércoles 13 de diciembre de 2017, p. 2
Melbourne. El tigre de Tasmania estaba condenado a la extinción mucho antes de que los humanos comenzaran a cazar a este marsupial australiano, informaron científicos, quienes indicaron que su ADN mostraba que sufría problemas de salud. Los científicos elaboraron un mapa del genoma del animal, también conocido como lobo marsupial o tilacino, utilizando los restos de un cachorro guardados durante un siglo en un frasco. La investigación mostró que la criatura comenzó a sufrir un declive en la diversidad genética hace más de 70 mil años, lo que lo hizo menos resiliente a los cambios del entorno, antes de la llegada del hombre a Australia, que ocurrió hace cerca de 65 mil años. El animal estuvo alguna vez presente en toda Australia, pero hace 3 mil años la sequía lo confinó exclusivamente a la zona de Tasmania. Se extinguió en 1936.