Sin tumultos, sólo con la presencia de la cúpula partidista, Andrés Manuel López Obrador formalizó su registro como precandidato presidencial de Morena. En un acto sobrio, sostuvo que su prioridad será la seguridad pública, y abundó en su propuesta que causó polémica: haremos todo lo necesario para conseguir la paz, someteremos a debate y consulta, principalmente con las víctimas, la posibilidad de otorgar amnistía a infractores que opten por su readaptación. Así ha sucedido en México y en otros países del mundo.

En un salón de la colonia Roma –ubicado a unos pasos de su oficina y habilitado como recinto oficial de Morena– llegó puntual para cumplir el protocolo que mandata la convocatoria interna en el estrecho margen de tiempo para solicitar el registro –de 12 a 12:30– para confirmar su largamente anunciada postulación a la Presidencia. En un apretado discurso, resumió su Proyecto Alternativo de Nación, en el que anticipó el final de la pregonada reforma educativa del gobierno de Enrique Peña Nieto

Ante una presencia de medios de comunicación mucho mayor que la de militantes de Morena, López Obrador –quien presentó su renuncia a la dirigencia del partido la víspera– vaticinó que en su gobierno se dejarán sin efectos las medidas establecidas en la mal llamada reforma educativa y, en acuerdo con maestros y padres de familia, emprenderemos acciones para una mejoría verdadera de la calidad de la enseñanza.

Entre sus prioridades, López Obrador también enumeró, en un decálogo de su proyecto, la atención, con urgencia, de la grave problemática del sector energético del país; se detendrá la caída en la producción de petróleo, gas, gasolina, diésel y petroquímicos.

Anticipó que las seis refinerías existentes se modernizarán y se construirán dos más para que todo el petróleo crudo se refine en México y se cancele la importación, a sobreprecios, de 600 mil barriles diarios de gasolina. En paralelo, se impulsaría la transición hacia el uso de energías alternativas renovables.

Como parte de su política social detalló los apoyos que se destinarán a jóvenes y adultos mayores.

Mencionó que los jóvenes que cursen el nivel medio superior tendrán una beca mensual; 3 mil universitarios de familias de escasos recursos obtendrán apoyos de 2 mil 400 pesos mensuales, y a quienes despectivamente se les denomina ninis serán contratados para capacitación laboral, con una percepción mensual de 3 mil 600 pesos; becarios sí, sicarios, no.

López Obrador hizo énfasis en la seguridad pública –cuya propuesta de amnistía a criminales le ha valido una andanada de críticas–, en torno a la cual se buscará atender las causas sociales y económicas que han dado origen al flagelo de la violencia, que produce 76 homicidios diarios y 33 millones de delitos al año que, en 99 por ciento, permanecen en la impunidad.

Anticipó que habrá mando único, que él mismo encabezará con reuniones matutinas diarias con el gabinete de seguridad (Secretaría de la Defensa Nacional, Secretaría de Marina, la nueva Secretaría de Seguridad Pública y la Procuraduría General de la República), que serán las únicas dependencias, junto con la Secretaría de Hacienda y la Presidencia, que no serán descentralizadas.

Enumeró el destino que tendrán las sedes de las dependencias cuando se concrete la descentralización de la administración pública federal: la Secretaría de Turismo, en Chetumal; Medio Ambiente, en Mérida; Petróleos Mexicanos, en Ciudad del Carmen; Energía, en Villahermosa; Desarrollo Social, en Oaxaca; Cultura, en Tlaxcala; Salud, en Acapulco; IMSS, en Morelia; la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación, en Guadalajara; Comunicaciones y Transportes, en San Luis Potosí, y Economía, en Monterrey, entre otras.

Al referirse al proyecto económico, destacó que el gobierno federal asumirá el papel promotor del desarrollo y fortalecimiento del mercado interno, que no implicará más impuestos, pero tampoco mayor endeudamiento. Confió en que los ahorros captados por la lucha contra la corrupción y el gasto suntuario –reduciría los sueldos de la alta burocracia– permitirán promover proyectos productivos.

López Obrador aseguró que con su registro comienza una nueva y definitiva etapa de lucha, y auguró: “juntos haremos historia.

Entre los asistentes estaban dos personajes hasta hace poco confrontados por la candidatura a la jefatura de Gobierno de Ciudad de México: Claudia Sheinbaum y Ricardo Monreal.

Sin mayores estridencias, Monreal anunció que en las próximas horas dejaría la delegación Cuauhtémoc, y sin aspiraciones de cargos ayudaría en la campaña de Morena.

–¿También a Sheinbaum?

–En todos lados –acotó y sin agregar más la calificó de una gran científica.

Concluido el acto, se explicó la ausencia de masas en el acto: no queríamos que fuera un acto faraónico, como el del PRI.