Madrid.

El bloque independentista está negociando y buscando fórmulas para constituir una mayoría parlamentaria que le permita formar gobierno e investir como presidente de la Generalitat a Carles Puigdemont, quien se encuentra refugiado en Bélgica desde finales de octubre y enfrenta una orden de detención en territorio español. El ex mandatario advirtió ayer que sería parte de la normalidad democrática que acudiera a la constitución de las nueves cortes, pero admitió que corre el riesgo de ser detenido de inmediato.

No existe contra Puigdemont una orden internacional de detención, pero sí una que es válida para todo el territorio español, así como operativos listos para apresarlo en cuanto ponga un pie en el país.

Las elecciones autonómicas del domingo pasado en Cataluña revalidaron la mayoría del bloque independentista. Ahora las tres formaciones que lo integran abrieron las conversaciones para encontrar las vías para la formación de un gobierno estable y con un programa en común.

Sin embargo, ahora no sólo tienen que valorar las prioridades que tendrán cuando asuman el poder, sino también cómo piensan abordar la compleja situación penal que amenaza a sus principales dirigentes, entre ellos quien aspira a ser relecto, Puigdemont, que está acusado de los delitos de rebelión, sedición y malversación de fondos públicos.

Ante lo inédito de la situación, desde el bloque separatista han llegado a proponer diversas estrategias. Entre ellas, que Puigdemont sea nombrado mandatario desde la distancia, sin salir de Bruselas y convirtiéndolo en el presidente de la república de Cataluña. También que él nombre un primer ministro que ejerza la labor de gobierno. De igual forma, se estudió la posibilidad de que otra persona recoja el acta de diputado de Puigdemont y de los ex consejeros refugiado con él, quienes también fueron electos, para así ganar tiempo ante la sesión de investidura, que tendría que ser a más tardar el 6 de febrero.

El punto de vista de los abogados

Después de analizar el reglamento de la cámara, finalmente los abogados de los políticos independentistas llegaron a la conclusión de que era prácticamente imposible que fuera electo a distancia, pues tiene que estar presente y eso lo obliga a viajar a España si quiere ser investido. Pero eso supondría su detención inminente y su comparecencia ante el juez del Tribunal Supremo, donde el juez Pablo Llarena, quien ha llevado la causa contra los líderes independentistas catalanes, podría declarar la prisión incondicional con el argumento de que hay riesgo de fuga.

Desde la distancia no es posible participar en el debate de constitución de la mesa del Parlamento; su reglamento no lo permite, señaló el abogado Juan Cuevillas, quien también informó que Puigdemont está dispuesto a volver, pero debe valorar si puede hacer más trabajo dentro o fuera. En cualquier caso, es una decisión política que deberá tomar en los próximos días.

El ex vicepresidente catalán y líder de Esquerra Republicana de Catalunya Oriol Junqueras publicó su primer mensaje en las redes sociales desde los comicios del pasado domingo. En la prisión madrileña de Estremara, donde está preso desde noviembre, advirtió: Nos ponemos al servicio de la libertad y de la justicia social, de la democracia, de una sociedad que tiene el derecho a ser lo que quiera si así lo quiere la mayoría de sus ciudadanos. Un abrazo inmenso y gracias a todos por vuestro compromiso y calor.