Tegucigalpa.

Un mes después de las elecciones presidenciales en Honduras la crisis política continúa luego de que este miércoles la Alianza de Oposición Contra la Dictadura interpuso un recurso de nulidad por fraude contra la declaración del Tribunal Supremo Electoral (TSE) que dio la victoria al presidente Juan Orlando Hernández, del Partido Nacional, para gobernar el país por un segundo periodo.

Manuel Zelaya, coordinador de la alianza izquierdista que postuló al presentador de televisión Salvador Nasralla, entregó al ministerio público la demanda el pasado martes. La querella argumenta que se detectó un presunto fraude en la suma de votos, alteración y falsificación de actas y otras irregularidades que se han traducido en la suplantación de la soberanía popular al legítimo vencedor de esta contienda, celebrada el 26 de noviembre.

El texto también recusa a David Matamoros y Saúl Escobar, dos de los tres magistrados del TSE por delitos electorales, al considerar que “tomaron partido por Hernández y adulteraron los resultados.

Hasta el último día de mi vida voy a defender el triunfo del pueblo, el de la alianza y el de Salvador Nasralla, proclamó este miércoles en conferencia de prensa el ex presidente Zelaya, depuesto en 2009 tras un golpe de Estado.

Después de 21 días de las elecciones, el TSE declaró el 17 de diciembre a Hernández como ganador de los comicios con 42.95 por ciento de los votos frente 41.25 de Nasralla. Los primeros resultados desataron violentas protestas que dejaron al menos 17 muertos, luego de que se detectaron irregularidades durante los escrutinios.

En tanto, el gobierno de Hernández rechazó la petición de Luis Almagro, secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), de enviar un delegado especial a territorio hondureño para investigar las muertes suscitadas durante las protestas y lo acusó veladamente de intervenir en los asuntos internos del país.

En una misiva remitida al bloque regional con fecha del martes, las autoridades locales dijeron que su principal argumento para negar permiso de entrada al investigador de la OEA es que la solicitud invade las atribuciones de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.

También criticaron la comunicación y la información vía Twitter utilizada por la secretaría general y aseguraron que su actuación ha sido contraria a la naturaleza y los propósitos de la organización. Ninguna de las disposiciones de la solicitud de la OEA autoriza a la secretaría general a intervenir en asuntos de la jurisdicción interna de los estados miembros, señala el escrito.

Almagro recomendó al gobierno hondureño convocar a nuevas elecciones ante las irregularidades constatadas por una misión de observadores durante los comicios. Además, autorizó, a petición del TSE, el viaje de uno de sus delegados para conocer la situación de las protestas, obtener información sobre los muertos durante las movilizaciones e ingresar a los lugares donde se encuentran detenidos algunos manifestantes.