Teherán.

Abdulrahim Mussavi, jefe del ejército iraní, advirtió este jueves que las fuerzas armadas podrían intervenir para ayudar a la policía a controlar las protestas contra el gobierno que tienen lugar desde el 28 de diciembre.

En tanto, miles volvieron a manifestarse para respaldar al gobierno iraní, un día después de que las autoridades proclamaron el fin del movimiento de protesta, que ha dejado al menos 21 muertos. El gran Satán (Estados Unidos), los sionistas (Israel) y su nuevo lacayo (Arabia Saudita) quieren dañar a Irán, pero si es necesario, el ejército participará en la lucha contra los seducidos por el demonio, afirmó Mussavi, según el portal de noticias Asriran.

Las autoridades acusan a los grupos contrarrevolucionarios y a los Mujaidines del Pueblo (organización en el exilio) de provocar disturbios, aprovechándose de las manifestaciones legítimas de la población contra las dificultades económicas, que después se extendieron al sistema político en el que tienen gran influencia los líderes religiosos.

La premio Nobel de la Paz iraní exiliada en Londres, Shirin Ebadi, llamó a la desobediencia civil y a continuar con las protestas contra el gobierno y el clero islámico en Irán, informó el periódico Al Sharq al Awasat.

El departamento estadunidense del Tesoro informó de nuevas sanciones contra Teherán, concretamente contra cinco grupos industriales.

Rusia advirtió a Washington contra cualquier intervención en los asuntos internos de Irán.