La Oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) condenó el asesinato del periodista Carlos Domínguez Rodríguez, suscitado el sábado en Nuevo Laredo, Tamaulipas.

Jan Jarab, representante de esa oficina en el país, indicó que este crimen es una muestra del riesgo que implica ser periodista en México, particularmente en Tamaulipas. Exhortó a las autoridades correspondientes a investigar en caso y que una de las principales líneas de investigación sea la labor periodística de Domínguez Rodríguez.

El asesinato del señor Domínguez confirma el riesgo de ser periodista en México y en particular en Tamaulipas, un estado ya señalado por el efecto inhibitorio sobre la libertad de expresión en el estudio de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) Zonas Silenciadas: regiones de alta peligrosidad para ejercer la libertad de expresión.

Agregó que esta entidad fue una de las cinco visitadas por los relatores para la Libertad de Expresión de la ONU y de la CIDH, David Kaye y Edison Lanza, respectivamente, quienes recientemente estuvieron en México en una misión oficial para corroborar la situación que enfrentan los periodistas, medios y la libertad de expresión en el país.

Tras dicha visita oficial, los relatores incluyeron en sus observaciones preliminares una recomendación al estado de Tamaulipas para adoptar una serie de medidas para prevenir la repetición de agresiones contra periodistas, restaurar la confianza con el gremio periodístico y consultar a la sociedad civil, resaltó Jarab.

Añadió que la impunidad favorece a quienes agreden o matan a periodistas y genera un círculo vicioso de violencia que urge frenar. Por ello, la oficina que represento hace un llamado contundente a las autoridades estatales y federales para que esclarezcan este caso mediante una investigación efectiva, sin dejar de lado una línea de investigación relacionada con la labor periodística del señor Domínguez.

Advirtió que durante los procesos electorales se incrementan las agresiones contra periodistas, por ello, es necesario que las autoridades federales y estatales adopten medidas específicas de prevención y protección de cara al proceso electoral de 2018.

En un comunicado, la delegación de la Unión Europea en México, junto con las embajadas de Noruega y de Suiza en el país, condenaron este crimen. La muerte de Carlos Domínguez Rodríguez demuestra una vez más el preocupante grado de violencia e intimidación al que se enfrentan muchos periodistas en México. Desde 2000, 14 periodistas han sido asesinados en el estado de Tamaulipas. Expresamos nuestra preocupación por la falta de resultados en las investigaciones abiertas para esclarecer los anteriores casos de estos asesinatos en México.

Llamaron a las autoridades a desplegar todos los esfuerzos para realizar una investigación expedita y transparente con el fin de identificar y juzgar a los responsables, para que el homicidio no quede impune.

Por separado, la organización Reporteros Sin Fronteras (RSF) lamentó este crimen y demandó a las autoridades realizar una investigación inmediata de los hechos. Alertó sobre una nueva ola de violencia contra periodistas en este año de elecciones federales.