A escala global se realizan alrededor de mil 600 investigaciones sobre tratamientos de inmunoterapia contra el cáncer y los medicamentos que han generado logran lo que parecía impensable: detener la progresión del cáncer de pulmón, pues en los pacientes que funciona logran una sobrevida, hasta ahora, de cinco a 10 años. Antes vivían unos cuantos meses después del diagnóstico, afirmó Julián Molina, profesor de oncología de la Clínica Mayo.

Con el desarrollo de la inmunoterapia se abrió un abanico amplio de alternativas que buscan entrenar al sistema inmune (de defensas) del organismo para que ataque a las células cancerígenas, comentó el experto, cuyo trabajo en la actualidad se ha centrado en los linfocitos T, los cuales son los responsables de hacer frente a las enfermedades.

En el caso del cáncer ese tra- bajo de defensa no ocurre. De ahí que Molina y su equipo de trabajo estén enfocados en desarrollar una molécula que modifique las células T a fin de que siempre ataquen al tumor, dijo el especialista durante el simposio Actualidades y nuevos tratamientos para el cáncer, organizado por el Hospital Médica Sur y la Clínica Mayo.

Expertos de ambas instituciones presentaron las novedades en el manejo de diversos tumores como de ovario, mama, linfoma, leucemia y mieloma múltiple.

Sobre el cáncer de pulmón, Molina comentó que con la inmunoterapia con células T se prevé aumentar la sobrevida de los pacientes. Estos tratamientos ya han demostrado su eficacia contra linfomas y leucemias. Indicó que ya están empezando los estudios clínicos en tumores sólidos de mama, colon y pulmón, entre otros.

Al hablar sobre los beneficios de la inmunoterapia, respecto de la quimioterapia, el especialista resaltó la ausencia de efectos secundarios: el cabello no se cae y tampoco provoca náuseas ni vómitos. Las personas están en mejores condiciones para realizar sus actividades cotidianas.

El fortalecimiento de las células T es un nuevo mecanismo de acción, aunque todavía es inaccesible para los pacientes.

Molina comentó que hace seis meses la Administración de Medicamentos y Alimentos (FDA, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos aprobó un producto de este tipo, cuyo costo asciende a 475 mil dólares por paciente. ¿Quién puede pagar eso?, se preguntó.

De todas maneras, los avances son promisorios luego de los esfuerzos que se hicieron, sin éxito, para desarrollar alguna vacuna. Ninguno de los productos obtenidos logró mejores resultados en cuanto a una mayor esperanza de vida y fueron desechados.

Por el contrario, los resultados de los primeros tratamientos de inmunoterapia han alentado a los científicos, a pesar de que para 75 por ciento de los pacientes los tumores regresan luego de tres o cuatro meses de uso ya que desarrollan resistencia a los medicamentos. Molina explicó que están en curso más de 50 proyectos de investigación para identificar las causas y la manera de contrarrestar este proceso. Una posibilidad, comentó el especialista, es que las células T se fatigan.