Berlín.

La fiscalía alemana presentó ayer cargos contra el ex enfermero Niels H. por el asesinato de 97 pacientes, 65 en el hospital de Dlemenhorst y 35 en el de Oldemburgo, a quienes mató por puro aburrimiento y ansia de notoriedad.

Ya ha confesado la mayor parte de los crímenes, aseguró el fiscal superior Martin Koziolek. El Tribunal Regional de Oldemburgo deberá asumir el caso.

Niels H. está actualmente en prisión, condenado a cadena perpetua por seis casos de asesinato o tentativa de homicidio tras ser descubierto en 2005 por una enfermera en el hospital de Delmenhorst, donde quiso darle un medicamento no prescrito a un paciente en la unidad de cuidados intensivos.

De acuerdo con las investigaciones, entre 2003 y 2005 Niels H. suministró fármacos a los pacientes para desencadenar fallos cardiacos o un colapso circulatorio.A continuación, los reanimaba para parecer un héroe ante sus colegas. Sin embargo, esto no funcionaba siempre y los enfermos fallecían.

Esta misma práctica, indicó la fiscalía, la llevó a cabo antes en el hospital de Oldemburgo, donde laboró de 1999 a 2002.

Lo hacía para poder dejar patentes sus habilidades en el campo de la reanimación de cara a sus compañeros y para combatir su aburrimiento, indicó Koziolek.