El Museo de Arte Carrillo Gil (MACG) festeja una década de colaborar con la bienal Programa Bancomer, que ha resultado en cinco exposiciones, la más reciente, Modos de ver, integrada por la obra de los nueve jóvenes artistas del periodo 2016/2017, abierta el viernes.

Vania Rojas, directora del MACG, expresó en rueda de prensa que en estos 10 años se ha apoyado a 50 artistas seleccionados entre más de mil 50 candidatos provenientes de 30 estados del país. Hemos visto crecer sus carreras y la manera en que el programa ha apoyado para catapultarlas, precisó. A lo largo de 18 meses de arduo trabajo se contó con la asesoría de Carlos Amorales e Irmgard Emmelhainz, así como Ana Villanueva y Paola Cervantes, de la Fundación BBVA Bancomer.

Los trabajos exhibidos en el segundo piso del museo son los mismos con los que participaron en la convocatoria los nueve seleccionados, aunque se vieron enriquecidos a lo largo de los dos seminarios y tres encuentros sostenidos. Hubo cerca de 300 solicitudes.

Para Gabriela Velásquez Robinson, directora de Fomento Cultural de la Fundación BBVA Bancomer, en esta quinta edición hemos logrado un nivel de madurez relevante. La curadora Tatiana Cuevas decidió programar el par de seminarios –el primero se enfocó en la reflexión de cómo tomar una postura crítica dentro de la obra y el sistema del arte– y un trío de encuentros. Además, algunos de los artistas pudieron viajar al extranjero, a lugares como Rusia, Corea del Sur, Grecia y Colombia, donde hicieron residencias. También se realizó un viaje de investigación a Mérida.

Tatiana Cuevas explicó que su papel de curadora consistió en formar un programa para acompañar los nueve proyectos individuales. De allí que la exposición carece de hilo conductor o tema central. Cuevas logró conjuntarlos luego de “mirar una serie televisiva de los años 70, Modos de ver, dirigida por John Berger, de la que salió un libro que ha sido materia obligatoria para los estudios de arte.

“Berger hizo a un lado las tendencias clásicas de cómo mirar la historia del arte, las cuales tienen que ver con un análisis formal de éste con temas de composición, color y textura, todos los aspectos formales, dejando a un lado el contexto político-social de estas piezas. Berger modificó y actualizó esta forma de ver el arte.

A lo largo de los seminarios cuestionamos cómo los sistemas y los valores del arte definen la producción y la manera de mirar hasta hoy día, que confunden en ocasiones la misión central del arte, que es aportar una nueva forma de ver, capaz generar una alternativa a las circunstancias que vivimos.

Modos de ver abre con la obra de Yolanda Ceballos, quien trabaja el dibujo y ha documentado casas en vías de destrucción en Monterrey. En cuatro años ha localizado 140, que aborda en tres fases: primero toma muestras de la destrucción, por ejemplo, tierra del terreno; habitación, consistente en recorrer el terreno tratando de memorizarlo; luego el dibujo y la estructura surgen a partir de los movimientos del cuerpo en forma de escultura.

Antonio Monroy realizó una videoinstalación a la manera de ceremonia acción provocada en el oriente y el poniente del estado de México, con el objeto de pensar en la resistencia de dos comunidades específicas ante el desarrollo de megaproyectos que constantemente los invaden.

La muestra cierra con el proyecto Sueño de casa, de Amauta García, consistente en tres esculturas y un video. Con mucho sentido del humor analiza sus posibilidades de comprar una vivienda mediante un crédito hipotecario que le ofrecieron y que tardaría en pagar 20 años, pero al doble. Descubrió que le alcanzaba para adquirir sólo cinco metros cuadrados en Santa Fe y 0.68 metros cuadrados en la zona más cara de El Pedregal.

Los demás artistas participantes son Julieta Aguinaco, Lorena Ancona, Cecilia Barreto, Victoria Estrada, Bayrol Jiménez y Pablo Tut.

El MACG se ubica en avenida Revolución 1608, colonia San Ángel.