Acapulco, Gro.

Cinco días después de la inauguración del hospital general de Acapulco en la comunidad El Quemado, ubicado en la periferia de este puerto, trabajadores reportaron que huele a aguas negras, tanto en áreas verdes como dentro del nosocomio. Asimismo, dijeron que persisten las filtraciones por humedad en la unidad de cuidados intensivos (UCI) pediátricos, por lo cual esta parte fue cerrada.

El 30 de enero anterior, el presidente Enrique Peña Nieto y el gobernador Héctor Astudillo Flores abrieron el nuevo hospital general de Acapulco El Quemado, a unos 30 minutos en automóvil del centro del puerto, cuya inversión fue de 826 millones de pesos del Fondo de Desastres Naturales.

Partes del hospital despiden olor a agua podrida, son los jardines principales los que despiden olores nauseabundos, refirió un camillero.

Trabajadores del nosocomio mostraron un video en el que señalan cómo el agua se filtra por el techo de la UCI pediátrica; incluso se observa a una enfermera que corre para impulsar y proteger equipo electrónico de la habitación, ante el agua que cae a borbotones del techo sobre una cama con equipo aparentemente nuevo.

En otro video más reciente se observa cómo cae el agua de un ducto del techo, a través de un artefacto utilizado para combatir incendios. Trabajadores que pidieron omitir su nombre señalaron que de momento el área sigue cerrada y fuera de servicio para su reparación.

Uno de ellos advirtió que el agua del caño se debe bombear cada semana, pues de lo contrario el fluido se regresa a las instalaciones del hospital. Explicó que en la parte superior de la UCI pediátrica se encuentra el conducto donde lavan los cómodos.

Añadió que existen fisuras en algunas paredes debido a los sismos registrados recientemente, en específico, el temblor ocurrido el 25 de diciembre de 2017, con magnitud de 5 grados, a las 14:23 horas.

El trabajador consultado expresó: Ayer que me presenté a trabajar noté que en la noche persistía un olor a drenaje, como a podrido; parece que porque riegan los jardines con agua reciclada. Subrayó que el nosocomio no cumple con las especificaciones técnicas de acuerdo con normas mexicanas de instalaciones hospitalarias.

Se ubica lejos del centro

Entre las principales quejas de los trabajadores, se encuentran la lejanía del nosocomio del centro de Acapulco, pues deben desplazarse en vehículo hasta 30 minutos, además la inseguridad, y el hospital no cuenta con una fuente de agua cercana.

Antes el hospital se encontraba en un punto céntrico de la avenida Ruiz Cortines, en la parte alta de Acapulco, con acceso en transporte público desde diversos puntos de la ciudad, mientras El Quemado se encuentra en la carretera Acapulco-México, en la zona rural del municipio. El gobierno estatal ha absorbido los costos de traslado de la plantilla laboral, de alrededor de mil trabajadores.

Durante la inauguración del nosocomio, el pasado 30 de enero, se explicó que el hospital cuenta con 120 camas y 170 en tránsito o de áreas de especialidades, así como 29 consultorios de especialidad para consulta externa, y equipo de última tecnología.