La base, una relación de iguales
Domingo 4 de febrero de 2018, p. 30
Una relación tutora hace posible que una adolescente de 14 años enseñe aritmética a una mujer adulta, un niño a sus padres, acerca de cómo usar las redes sociales, y un compañero de clase matemáticas a otro, porque se pone el acento no en cómo se enseña, sino en aprender
, afirmó Inés Aguerrondo, coordinadora general del proyecto de tutoría en la provincia de Buenos Aires, Argentina.
De visita en México con un grupo de 17 especialistas y docentes argentinos que promoverán en las aulas una nueva metodología didáctica, Aguerrondo dijo que este modelo permite generar habilidades para aprender a lo largo de la vida
al crear un vínculo de respeto por el otro y una relación de iguales, y esto es una creación latinoamericana que puede revolucionar lo que ocurre en las aulas
.
Diseñada por la organización Redes de Tutoría, galardonada en 2016 por este proyecto considerado una de las cien mejores innovaciones educativas del mundo, esta metodología puede generar una verdadera revolución en los salones de clases de la región
, afirmó Emilia, profesora de historia y directora de uno de los cinco planteles educativos de la ciudad de Baradero, en la Provincia de Buenos Aires, donde a partir de marzo próximo se buscará incentivar de forma voluntaria que docentes y alumnos se sumen a la red de tutorías.
El modelo propone que una persona, sea niño, adolescente o adulto pueda tutoriar a otro y enseñarle un tema determinado respetando los procesos individuales de aprendizaje, recuperando conocimientos adquiridos y respetando su contexto cultural, por lo que, afirmaron los especialistas, puede ser un esquema exitoso para impulsar el aprendizaje.
En Argentina nos presentaron este proyecto en diciembre pasado, al final de nuestro ciclo escolar, y nos atrajo porque es una nueva forma de dar clases, una didáctica diferente con respecto a cómo estamos acostumbrados a dar clase, porque una de las grandes preocupaciones que tenemos es que nuestros estudiantes aprendan más, porque consideramos que no estamos logrando ese objetivo fundamental que es, más allá del contenido, aprender a aprender
.
Al respecto, la experta en planificación y reformas educativas, señala que la red de tutorías resuelve la educación personalizada, atiende el ritmo de aprendizaje del niño y, sobre todo, hace que no solamente se aprenda a aprender, sino a enseñar
.
En el futuro la sociedad va a requerir que todos aprendan a lo largo de la vida, dijo; una parte es el conocimiento que adquieran por sí mismos, y otra el que obtengan de los demás. El fondo en esta propuesta es que acerca el aprendizaje significativo a los sectores de la sociedad que la escuela tradicional no logra alcanzar. No es una metodología costosa, porque no se trata de que el profesor dé una tutoría cara a cada, sino que sean estudiantes los que se van a tutoriar entre sí
.
Afirmó que en la mayoría de los sistemas educativos del mundo, el gran problema es que no usamos 80 por ciento de la matería gris que está en el sistema. No usamos a los alumnos, que son personas que saben, y que afuera de la escuela enseñana a otros, hacen sus propias investigaciones en Internet, y comparten con otros, pero en la escuela los consideramos incapaces porque estamos sosteniendo un modelo de distribución del conocimiento obsoleto, que todavía se rige por disciplinas, y no por la resolución de problemas
.