Martes 6 de febrero de 2018, p. 3
Washington.
El ruido de trenes, aviones y automóviles se ha vinculado con el desarrollo de la enfermedad cardiaca.
Investigadores indicaron que esto se debe a que el ruido podría afectar el cuerpo a nivel celular de manera tal que aumente los efectos de los factores de riesgo comunes para el mal.
En el trabajo, publicado en Journal of the American College of Cardiology, se analizaron novedosos estudios de ruido translacional que demuestran mecanismos moleculares que podrían conducir a afectaciones en la función vascular, evidencia epidemiológica reciente de enfermedad cardiovascular inducida por ruido y los efectos no auditivos del ruido y su impacto sobre el sistema cardiovascular.
Plantean que el ruido induce una respuesta de estrés caracterizada por la activación del sistema nervioso simpático y niveles aumentados de hormonas, lo cual podría tener secuelas y finalmente conducir a daños vasculares.
Los investigadores indicaron que su evidencia refuerza aún más el concepto de que el ruido del tráfico contribuye al desarrollo de factores de riesgo de enfermedad cardiaca como hipertensión y diabetes.