Viernes 9 de febrero de 2018, p. 22
Asociaciones de la industria aeronáutica presionan al gobierno mexicano para que revierta el aumento a la tarifa que se cobra a los pasajeros extranjeros que llegan al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), con el argumento de que dañará a las aerolíneas y la competitividad del país.
La tasa fue incrementada 25 por ciento a 51.12 dólares este año para ayudar a financiar un bono de 2 mil millones de dólares para la construcción del nuevo aeropuerto de la capital.
La Asociación Internacional de Transporte Aéreo (Iata, por sus siglas en inglés) y la Asociación Latinoamericana y del Caribe de Transporte Aéreo (Alta), que representan los intereses de aerolíneas, se opusieron al aumento.
Aeroméxico, Interjet y Volaris son las líneas mexicanas más importantes que usan el aeropuerto y están entre las compañías más grandes del sector en el mundo.
Las asociaciones enviaron en enero una carta a la subsecretaria de Transporte, Yuriria Mascott, y al subsecretario de Hacienda y Crédito Público, Miguel Messmacher, dijo el jueves a Reuters el director ejecutivo de Alta, Luis Felipe de Oliveira.
En la carta, las asociaciones advirtieron que el alza de la tarifa podría resultar en 1.7 millones de pasajeros menos por año y que eso reduciría los ingresos totales.
Eso representaría una caída de casi 11 por ciento de los 15.8 millones pasajeros internacionales que usaron el aeropuerto de la Ciudad de México en 2017, según datos de la terminal.