Londres.

Lionel Messi salvó al Barcelona, que mostró una cara gris has- ta que el argentino acudió al rescate tras un regalo del rival, con un gol para el empate 1-1 en el campo del Chelsea, en la ida de octavos de final de la Liga de Campeones, donde el Bayern Munich arrolló al Besiktas con un 5-0. Hoy jugarán Sevilla-Manchester United y Shakhtar-Roma.

Los alemanes dejan su eliminatoria decidida, salvo improbable desastre en la vuelta. En tanto, el Barça brindó un choque emocionante, aunque de poca calidad. El cuadro azulgrana apenas creó ocasiones de gol. Vivió en el filo de la navaja tras el tanto al minuto 62 de Willian para el Chelsea, y Messi propició un gran resultado con su anotación al minuto 75, de cara a la vuelta en el Camp Nou.

El Barcelona busca el triplete: en la Liga española es líder, con siete puntos de ventaja sobre el segundo, el Atlético de Madrid, y en la Copa del Rey se medirá en la final al Sevilla en abril. Por eso continuar adelante en Champions se presenta como el principal desafío para el equipo.

El Chelsea, que tiene casi imposible revalidar su corona en la Liga Premier –es cuarto a 19 puntos del líder, el Manchester City–, confía en la Liga de Campeones para poder brillar este año. Por el momento tendrá la difícil tarea de viajar a Barcelona con un resultado muy incómodo y con la obligación de marcar.

Willian había enviado el balón dos veces al palo en la primera mitad y a la tercera no falló: recibió de Hazard en el centro del área y encontró el hueco para enviar un tiro que entró por abajo, pegado al palo izquierdo de Ter Stegen, quien se quedó clavado, siguiendo el balón con la mirada.

Al Barça le costó reaccionar, pero consiguió el ansiado gol cuando el reloj entraba en el último cuarto de hora. Andrés Iniesta robó un balón en la frontal del área, aprovechando una falta de coordinación de la zaga azul, y cedió para que Messi enviara un tiro que supuso el 1-1.

En el otro partido del martes en la Champions, el guión fue más sencillo, con un 5-0 del Bayern ante un Besiktas que jugó casi todo el encuentro con un hombre menos.

La roja para el croata Domagoj Vida en el minuto 16 allanó el camino, antes de que Thomas Müller (43 y 66), Kingsley Coman (53) y Robert Lewandowski (79, 88) consiguieran los goles del triunfo bávaro.

El principal contratiempo de los germanos llegó con el cambio del colombiano James Rodríguez instantes antes del descanso, después de haber recibido un pelotazo en la cara.

Todo sonríe al Bayern, que desde la llegada de Jupp Heynckes al banquillo parece una máquina imparable: son ya 22 los triunfos en 23 partidos desde que el veterano técnico sustituyó al italiano Carlo Ancelotti.