Todo el mundo cambiará cuando haya igualdad
, asegura la protagonista de The Post
Como feminista creo que estamos en el momento más optimista en 40 años, destaca
Considera que las mujeres que votaron por Trump lo hicieron para hacer felices a sus maridos
Sábado 24 de febrero de 2018, p. 7
Nueva York.
Meryl Streep ha sido nominada por vigésima primera vez a un Óscar por el drama The Post, todo un récord y casi el doble que Katharine Hepburn y Jack Nicholson, cada uno con 12 nominaciones. Además, Hollywood la alaba por sus combativos discursos y su incansable lucha por los derechos de las mujeres.
En entrevista, Streep explica por qué participa en el debate actual sobre los abusos sexuales en Hollywood y por qué, según su opinión, han votado tantas mujeres por Donald Trump.
–La trama de The Post se desarrolla en los años 70 y trata de un momento histórico especial para las mujeres. ¿Cree que esos años fueron exitosos para las mujeres y que representan el comienzo de un movimiento?
Streep: En cualquier caso ahora mismo está ocurriendo algo. Incluso aunque aquí, en esta mesa, hay muy pocas de nosotras. Aquí hay ocho hombres y tres mujeres y esa es normalmente la proporción actual.
La cultura, determinada por los hombres en la cumbre
–Hace 45 años, cuando acabó la universidad en 1971, no había habido ninguna mujer. ¿Cómo fue para usted? ¿Hubo en su carrera algún momento en el que se cansó de interpretar a la amante y se propuso dejar de mostrar el torso?
–Gusta ver cómo la gente descubre su torso, eso no dejará de ocurrir, ¿por qué tendría que hacerlo? La cuestión es quién decide lo que vemos en las películas. En Estados Unidos hay 10 importantes compradores en la distribución de películas para diferentes regiones y ahí son todos hombres. Esto les muestra enseguida el tipo de películas que se emiten en todos los centros comerciales de Estados Unidos.
“Nuestra cultura está determinada por los hombres en la cumbre. Si la mitad de la dirección de The Weinstein Company estuviera compuesta por mujeres, nada de esto habría pasado. Tras el primer pago por un acuerdo extrajudicial, alguien hubiera preguntado para qué es el dinero y habría decidido que no se pagase por ello nunca más.
Todo el mundo cambiará cuando haya igualdad (de género) y exista compañerismo. No se trata de remplazar a nadie, sino de compartir.
–En The Post actúa por primera vez con Tom Hanks. ¿Por qué ha tardado tanto?
–Creo que nunca hemos trabajado juntos porque soy muy mayor para él. Él es siete años menor que yo. Esto no ocurre en los guiones, él necesita mujeres que sean 20 o 25 años más jóvenes. A mí me colocaron con hombres 20 o 25 años mayores.”
–Esto también depende de quién decide los papeles. Si hablamos de cómo los hombres determinan las películas que se producen, ¿qué pasa con la forma en que los hombres determinan la política? Pensemos en lo desdeñoso que fue el entrevistador estadunidense Matt Lauer con Hillary Clinton y que más tarde se descubrió que también él había abusado de mujeres.
–Exactamente lo mismo. Actualmente estamos viviendo un ajuste de cuentas y eso es maravilloso, es emocionante. Como feminista creo que vivimos el momento más optimista en 40 años a costa de las destrozadas vidas de algunas mujeres. Nuestro debate actual cambiará algo, lo siento.
–¿Cómo se explica que una mayoría de mujeres blancas hayan votado por Donald Trump?
–Porque todo el debate sobre quién decide las cosas, quién dirige el gobierno, quién encabeza la dirección de una empresa, quién dirige un periódico o una cadena de televisión, está relacionado. En el cine, los estudios de mercado han demostrado que al final son las mujeres las que deciden qué película ver. Pero ellas eligen en una cita una película que creen que le va a gustar al hombre. Es como cuando cocino una cena según lo que le gusta a la gente que se va a sentar a la mesa y no lo que yo quiero comer. Las mujeres ceden el paso a los demás. Ellas piensan qué es bueno para la relación o para el grupo.
–¿Y Trump y 52 por ciento de las mujeres blancas que votaron por él?
–Mucho de eso tiene que ver con la misoginia y con que se culpó a Hillary por los errores de su marido. Pero también una parte de ello tiene que ver con que muchos hombres en Estados Unidos están desempleados en casa mientras sus mujeres tienen dos trabajos a la vez. El hombre es infeliz y, ¿cómo lo hago feliz? Votando a Trump.