San Jacinto Amilpas, Oax.

Debemos salvar a la naturaleza, afirmó Ivana Montalvo Maldonado, de ocho años de edad, quien la mañana de ayer se casó con un árbol, como parte del proyecto Corazones Verdes por la Naturaleza y los Niños que impulsa el artista y ambientalista peruano Richard Torres, iniciativa que ha llevado a 16 países de Centro y Sudamérica para promover la protección del medio ambiente.

Alrededor de 50 personas se reunieron en el río Chiquito de San Jacinto Amilpas, municipio conurbado a la ciudad de Oaxaca, y en una ceremonia pidieron permiso a la naturaleza para llevar a cabo las bodas.

Bendijeron los cuatro puntos cardinales y colocaron una ofrenda a Pachamama (Madre Tierra, en la cultura inca), la cual consistió en azúcar, sal, mezcal, chocolate, granos y agua.

Después Richard Torres preguntó a los contrayentes si deseaban casarse con los árboles. Advirtió que el compromiso no sólo sería con uno de esta zona, sino que también es un pacto para defender y cuidar la naturaleza.

Cada uno de los participantes buscó un árbol, los cuales fueron adornados con velos de novia o moños de novio. Un joven ofreció granos al árbol que escogió; otros los abrazaron, besaron o les hablaron.

Andrea Tanat, de 27 años, explicó que ella se enteró de este proyecto hace un par de días y decidió participar. El hombre ya le ha hecho mucho daño a la Madre Tierra, así que es momento de resurgir, de hacernos uno con la naturaleza, expresó.

Richard Torres, quien hace años se casó con el milenario Árbol del Tule, en el municipio de Santa María El Tule, explicó que es la primera ceremonia de este tipo que se realiza en México.

Planea realizarla en Chiapas y Mérida, Yucatán, y el próximo 10 de mayo en la Ciudad de México. También buscará llevar su proyecto a Estados Unidos y proponer al presidente de ese país, Donald Trump, que en vez construir muros siembre vida.

Recordó que en México se talan anualmente mil 500 hectáreas de bosques, lo que consideró inadmisible.