Cancún, Q. Roo.

En la conservación y explotación sustentable de mares y océanos se deben fijar metas precisas. Y, al hacerlo, “es evidente que los gobiernos enfrentarán resistencias y tendrán que superar la oposición de quienes ven afectados sus intereses en el muy corto plazo, pero el resultado final lo amerita’’, planteó el presidente Enrique Peña Nieto.

En la apertura de los trabajos de la Cumbre Mundial del Océano, a donde acuden más de 450 expertos sobre el tema, el mandatario llamó a ser audaces, comprometidos, decididos y entusiastas para lograr el equilibro entre aprovechamiento económico y cuidado del patrimonio marítimo.

Describió la actuación mexicana en este caso: “hemos comprendido la urgencia de conservar ese equilibrio. Es el mayor desafío que enfrenta hoy la humanidad y queremos contribuir a este gran reto’’.

Patrocinado por el semanario The Economist, el encuentro tuvo también como invitado especial al presidente de Islandia, Gudni Thorlacous Johannesson, quien tras la ceremonia inaugural tuvo un encuentro con el presidente Peña Nieto.

Para el mandatario, la designación de zonas protegidas o restringidas a la actividad económica representan las mejores herramientas de protección de los mares por parte de los gobiernos. En el país, 23 por ciento de las áreas marinas y costeras está clasificada bajo alguno de esos regímenes.

Y dentro de ésta, definió como la acción “que más nos enorgullece’’ el decreto de designación del Parque Nacional del Archipiélago Revillagigedo porque ésta es hoy la mayor área marina protegida en América del Norte.

Así, para Enrique Peña Nieto, en el logro de un uso sustentable de los recursos marinos “tenemos que equilibrar el deseo de explotarlos con la necesidad de protegerlos, y esto significa que se debe contar con los incentivos y los disuasivos adecuados’’.

Para continuar el aprovechamiento de los beneficios económicos y al mismo tiempo no sobrexplotar los mares, planteó la alternativa de la acuacultura. Esta actividad, expresó el Presidente, ha crecido alrededor de 16 por ciento en el quinquenio reciente; en el país, la cuarta parte de la producción pesquera y acuícola cuenta con una certificación de sustentabilidad, cuando el promedio mundial es apenas de 12 por ciento.

Luego habló de los esfuerzos por salvar especies en peligro de extinción y sus hábitats naturales. En esa labor, “hay que dar la pelea de nuestras vidas’’ porque los casos exitosos sólo lo han sido a partir de convertirse en objetivo prioritario y al cual deben destinarse recursos cuantiosos, debe haber un esfuerzo coordinado entre sociedad y gobierno y aplicar todo el conocimiento y la tecnología disponibles. Incluyó aquí los programas oficiales para salvar a la vaquita marina.

De ese modo, para Peña Nieto, como fuente invaluable de alimentación y riqueza, la conservación y aprovechamiento sustentable de mares y océanos es tarea que compromete a todos, y por ello llamó a a participar en esta misión, “manteniendo el equilibro entre explotación y cuidado del medio ambiente’’.