Pyeongchang.

Con el tema de pasión, que es la fuente de energía que lleva a los atletas paralímpicos a moverse y a crear el mundo de la coexistencia donde no hay distinción de las personas por discapacidad, sino el reconocimiento de las diferencias, se inauguraron los Juegos de Invierno en Pyeongchang que culminarán el 18 de este mes.

La ceremonia de apertura comenzó con un video que mostró una cuenta regresiva con un termómetro rojo, el cual simboliza la pasión y energía ardientes de los atletas que han esperado mucho tiempo para la competencia. Un intérprete con un brazo prótesis golpeó un tambor gigante para dar la bienvenida a los atletas y espectadores de todo el mundo. Le siguió una actuación de percusiones tradicional con un cubo de centeno. Después se presentaron bailarinas vestidas con el tradicional vestido coreano Hanbok, quienes danzaron de manera elegante y sofisticada al ritmo de los tambores para dar paso al desfile de las delegaciones.

En los Paralímpicos de Pyeongchang participarán 570 atletas de 49 países, incluida la República Popular Democrática de Corea (RPDC), que participa por primera vez, mientras Rusia, con un contingente de 30 deportistas competirá con la bandera del IPC (Comité Paralímpico Internacional), debido a la sanción por dopaje de su país.

La antorcha paralímpica, que viajó por toda la República de Corea, entró al estadio y fue entregada de un portador a otro para recorrer todo el estadio. La llama fue depositada en el pebetero con la forma de un jarro, una porcelana blanca que simula una luna llena.

El abanderado Arly Velásquez, único mexicano de silla de ruedas, se reportó listo para entrar en acción este sábado, cuando se entreguen las primeras medallas.

Velásquez Peñaloza, de 31 años, tuvo su mejor actuación en Sochi 2014 al quedar en el puesto 11 en descenso. Al siguiente día entrará en acción en la prueba de Súper-G y cerrará la actuación en el Slalom Gigante el 17, todo dentro del esquí clasificación LW10-1.