Después de un inicio de temporada de ensueño, los Pumas han perdido la garra. La escuadra felina exhibió uno de sus peores juegos de la campaña, cayó 0-1 ante Toluca con autogol de Marcelo Díaz en la jornada 11 del torneo Clausura 2018 y llegó a cinco partidos sin ganar.

En el estadio Olímpico Universitario los Pumas fueron presa fácil y generaron poco peligro. La ventaja que obtuvieron en los primeros seis encuentros se está esfumando, sólo tienen 15 puntos y han quedado fuera de los puestos de liguilla.

Los Diablos fueron más ofensivos, aunque tuvieron que valerse de la falla de Marcelo Díaz para concretar la victoria. Llegaron a cuatro triunfos de manera consecutiva y tienen 21 unidades, acechando el liderato.

Luis Quiñones no desaprovechó el tiempo y casi enseguida del silbatazo inicial intentó llegar a las redes de los auriazules. El colombiano atacó por la banda derecha y lanzó un potente disparo que fue desviado por el arquero Alfredo Saldívar.

El Toluca encontró rápidamente la fórmula para dominar a unos Pumas famélicos, que apostaron por el contragolpe, pero en escasas ocasiones lograron poner en peligro el arco escarlata.

La más cercana fue cuando Nicolás Castillo mandó un centro a Matías Alustiza, quien emprendió el ataque, pero fue detenido por una fuerte barrida de Osvaldo González. El canterano Alan Mozo era de los pocos que encaraban al rival y en una ocasión lanzó un tiro. Sin embargo, fueron sólo chispazos.

El Toluca mantuvo el control del balón, atacó sin complicaciones, tenía todo para anotar, pero perdonaba. Las deficiencias del plantel universitario fueron exhibidas: no lograba conservar el esférico y permanecía replegado, sin coraje para salir en busca del gol.

El técnico David Patiño tuvo que prescindir de Luis Fuentes, por temas personales, mientras a Pablo Barrera lo relegó a la banca como castigo por la indisciplina que mostró el jugador en la jornada anterior. Decisiones que le costaron caro en la cancha.

Fernando Uribe desequilibró en más de una ocasión a los felinos con ataques por la banda derecha y una vez tiró a portería, para que de nueva cuenta Saldívar salvara a los universitarios. La defensa de los locales era endeble y Leonel López también tuvo su oportunidad con un disparo que pegó en el poste.

Cristian Borja dejó escapar una importante jugada, al fallar un remate a escasos metros de la portería. Desmarcado, el defensa conectó un tiro de esquina, pero el balón pegó en su hombro para después caer a las manos de Saldívar. ¡Otro gol que se le iba a los escarlatas!

Los Pumas eran golpeados y no encontraban la manera de defenderse. En las gradas, la afición auriazul no perdía la esperanza y gritaba el clásico ¡Goya, Goya! Pedía que el conjunto auriazul despertara y mostrara la garra con la que inició el torneo.

En el complemento los Pumas revivieron, mientras los Diablos sufrieron un bajón anímico; el intenso calor del mediodía afectó el rendimiento de los escarlatas.

Patiño reconoció que necesitaba de una pieza clave y al minuto 57 mandó a la cancha a Barrera por Alan Acosta. El cambio levantó por instantes la ofensiva de los locales y finalmente buscaron las redes del rival.

Barrera comandó ofensivas por la derecha y envió un potente disparo cruzado que pasó a centímetros de la línea de gol. El volante lamentó la falla; se le había ido una jugada trascendental.

Los felinos intentaban revertir su mala actuación de la primera parte, aunque el esfuerzo no era suficiente. En la banca, Patiño era presa del nerviosismo, rechinaba los dientes y buscaba alternativas para que su equipo no cayera en la cancha. Sacó del terreno de juego a Matías Alustiza y dio paso a Mauro Formica, pero nada, los universitarios peleaban sin contundencia.

Cuando los Pumas finalmente habían desplegado su mejor juego fueron sorprendidos al minuto 85 por un fuerte golpe. Alexis Canelo desbordó por el carril derecho, superó a la zaga, mandó un centro y Marcelo Díaz erró al empujar el balón en propia puerta. Sin querer, el chileno había regalado el gol de la victoria a los Diablos.

Los felinos tendrán una complicada prueba en la fecha 11, cuando visiten a Cruz Azul, que recuperó la confianza al golear 5-0 a Pachuca. El técnico celeste Pedro Caixinha asistió al duelo de Pumas para estudiar al futuro rival.

Asumo la responsabilidad

Nervioso, Patiño dejó claro en conferencia de prensa que el único culpable soy yo, asumo toda la responsabilidad. Después de 40 minutos de terminado el encuentro se presentó ante los medios. La realidad del equipo es que hicimos un buen inicio de torneo, que generó un colchón que ya no tenemos. Estamos en un bache profundo, aseveró.

Al ser cuestionado sobre si el equipo podría recurrir a un coach como lo ha hecho Cruz Azul para levantar el estado anímico, dijo: “No lo hacemos público, pero el equipo trabaja con coaching desde hace ya bastante tiempo. Tenemos un grupo de coaches internamente y lo venimos haciendo desde hace tiempo”.

El timonel prefirió no explicar los motivos por los que mandó a Barrera a la banca al inicio del encuentro. Es una decisión personal y asumo la responsabilidad.

En tanto, Hernán Cristante se mostró contento con el triunfo al destacar la entrega y humildad de su escuadra. El autogol no fue la mejor jugada, pero el equipo tiene entrega, ganas de trascender y se lo merece más que nadie.

Consideró que Alfredo Talavera es el indicado para ser el arquero titular de la selección mexicana en el Mundial de Rusia 2018 al afirmar que era superior a Guillermo Ochoa.

Tiene todas las capacidades de estar en la selección, creo que es uno de los candidatos naturales, tiene la capacidad. Sí, creo que está por encima de Ochoa, estoy pecando un poquito de soberbia, porque es mi jugador, pero lo veo bien, declaró.