México. Balance Externo 2017
e la farragosa nueva presentación de la Balanza de Pagos (formato MBP-6 del FMI) se desprende que en 2017 México registró un déficit en Cuenta Corriente de -18 mil 831 millones de dólares, desequilibrio externo (crónico) que fue, como es insana costumbre, financiado con dinero externo que ingresó vía inversión extranjera y préstamos en la (ahora) Cuenta Financiera por un pasivo neto de 26 mil 261 millones (de los cuales 4 mil 765 m provinieron de una baja de la Reserva Internacional), y por un ingreso en la (disminuida) Cuenta de Capital por un saldo de 150 millones. Por diferencia, la cuenta de ajuste Errores y Omisiones presenta un saldo negativo de -7 mil 580 millones de dólares (Gráfico 1).
Cuenta Corriente
Para una mejor apreciación de sus componentes básicos, sintetizamos en un cuadro esta cuenta y sus cuatro balanzas (Gráfico 2). En 2017 la balanza de mercancías fue deficitaria en -10 mil 897 millones de dólares, la de servicios en -9 mil 796, y la de renta en -26 mil 233; la balanza de transferencias (remesas casi en su totalidad) fue, como siempre, la única con superávit: 28 mil 095 millones.
En acumulado quinquenal, la Cuenta Corriente totaliza -126 mil millones de déficit; y de sus balanzas, la de mercancías -42 mil m, servicios -56 mil m, y renta -151 mil m. La balanza de transferencias, en sentido inverso, acumula un superávit de 123 mil millones.
De estas transferencias, el rubro específico de las remesas que envían los emigrantes a sus familias mantuvo en 2017 el incremento constante del quinquenio y llegaron a 28 mil 771 millones de dólares (Gráfico 3), y a un acumulado 2013-17 de 126 mil 499 millones.
El déficit de la Cuenta Corriente (-18.8 mil m) fue el más bajo del quinquenio y representó el 1.6% del PIB (Gráfico 4).
Cuenta Financiera
Siguiendo la interpretación / traducción del Banco de México, esta cuenta registró en 2017 un endeudamiento neto que implicó una entrada de recursos por 26 mil 261 millones de dólares. Este saldo resultó de la combinación de: un endeudamiento neto de (-) 24 mil 612 mdd por inversión extranjera directa y de (-) 7 mil 920 mdd por inversión de cartera, más una disminución en los activos de reserva por (-) 4 mil 765 m; y se suman préstamos netos al resto del mundo por 7 mil 351 mdd en el rubro de otra inversión y de 3 mil 684 m en el renglón de derivados financieros (Gráfico 5).
Destacamos en esta ocasión la fuerte salida de capitales de mexicanos al exterior según su destino, en el entendido de que se trata sólo de las salidas registradas y por tanto no incluyen las enormes salidas subrepticias. En el quinquenio 2013-17 salieron del país 153 mil millones de dólares, de los cuales 46 mil fueron para inversión directa (productiva) y por ello justificable en lo general, y 108 mil mdd fueron inversiones financieras (de cartera, en valores, o depósitos (Gráfico 6)
Poco justificables, las grandes sumas de inversión financiera de mexicanos en el exterior difícilmente van a ganar más, pero sí gravitan sobre la limitada disponibilidad de divisas. Bueno sería revisar la lógica de endeudar externamente al país (sólo la deuda pública ascendió a 194 mil millones de dólares en 2017) para acabar financiando una fuga injustificada de capitales, y más ahora con una casa blanca en pie de guerra económica.
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