El grupo parlamentario del PRI en la Cámara de Diputados evaluó que no es el momento para discutir una nueva ley en la materia, confirmó el presidente de la Comisión de Agua Potable, Ignacio Pichardo Lechuga.

Sería absurdo, en un momento tan delicado de la vida política nacional que aprobáramos la ley, dijo en entrevista. El tema se dejará para la próxima legislatura y sostuvo que el uso del agua para la práctica de la fractura hidráulica o fracking, para la extracción de gas, no es materia de esta ley.

El legislador expuso que si bien existe la obligación constitucional para que la Cámara vote una ley de agua, la discusión se quedará trunca, por lo que negó exista un proyecto de dictamen.

“En la anterior legislatura sí se aprobó uno, pero se paró en una etapa donde venía la elección intermedia. Uno de los argumentos fue que no hubo proceso de consulta y además decoraron el tema con el argumento de que había rasgos de privatización y el fracking”, dijo.

Recordó que a partir de 2015 la actual comisión reanudó la discusión, pero ésta acordó que se realizaría en cinco etapas. Se cumplieron las dos primeras, la fundamentación y la conceptualización. Nos reprocharon por qué no pasamos a la tercera etapa. En eso estamos, en la consulta para contar con un borrador del articulado, explicó.

No hay fast track

Pichardo refirió que hace dos semanas se señaló que la comisión está por emitir un dictamen con un contenido privatizador del agua. Pero en el articulado, que se encuentra en el micrositio de la comisión en la página en Internet de la Cámara, prevalece tal cual la ley vigente, que permite los sistemas de asociación.

–También se cuestiona el trasvase para el fracking– se le comentó.

–Ahí, y no es aportación nuestra, sino de la Conagua, que envió un documento a la Comisión de Recursos Hidráulicos, se plantea que el trasvase sea preferentemente para uso doméstico urbano. Hay quienes dicen que lo de preferentemente deja abierto al fracking. Si quieren que se defina como exclusivamente, díganlo.

“Lo que se hizo mañosamente fue calentar el ambiente para recetarnos la misma dosis que en la anterior legislatura, que les funcionó. Pero no hay tal fast track para esta ley. El proceso de recepción de opiniones está abierto.”

–Si éste no es el momento y es el último periodo de sesiones, ¿se quedará pendiente para la otra legislatura?

–Viendo que no nos iba a dar tiempo por lo delicado de la materia y la profundidad del análisis que se necesita, lo que tratamos es dejar una conexión de los trabajos de esta legislatura con la que venga.

–Sin embargo, se avecina un problema por el agua.

–Espero que no tengamos que estrellarnos como Sudáfrica para tomar cartas en el asunto. Ahí están los elementos de la discusión perfectible, es un borrador de trabajo en la búsqueda de coincidencias. Confío que no sea cuando tengamos la ciudad paralizada y las carreteras tomadas.