El ex árbitro Armando Archundia dijo que Rafael Puente júnior, timonel de Lobos de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), busca desviar la atención de lo que no está haciendo bien su equipo. Su reacción es normal y hasta común cuando la presión empieza a hacer mella en jugadores, directores técnicos y directivos.

El sábado, tras la derrota (0-1) ante las Chivas, Puente acusó al silbante Diego Montaño de ser tendencioso e incompetente; aseguró que todo el tiempo favoreció al Rebaño y que no tiene capacidad para pitar en primera división.

No sólo el técnico perdió la cabeza, pues el zaguero Francisco Maza Rodríguez, al finalizar ese partido, luego de repartir autógrafos y posar para fotografías, dio un fuerte empujón a un aficionado que lo insultaba. El momento fue captado en video y subido a redes sociales, por lo que la Comisión Disciplinaria anunció que abrió una investigación de oficio. También aceptó la inconformidad del club y quitó el castigo al mediocampista Jesús Aquino, quien fue expulsado.

Archundia indicó: “Considero que los árbitros están trabajando bien, tienen su conciencia tranquila. Nadie sale a equivocarse y para los equipos que están en situación crítica lo más fácil es quitarse la responsabilidad y acusar al árbitro. Es lo más sencillo. Acá –entre los nazarenos– no se van a defender, aunque habrá quien conteste, pero en general hay tranquilidad”.

Afirmó que los silbantes son el blanco favorito de los clubes en crisis y eso es parte del futbol. Rafael Puente se equivoca, señala injustamente a alguien en lugar de tomar al toro por los cuernos y sacar adelante su compromiso. Inclusive, Archundia comentó que el equipo poblano quiere con sus quejas presionar al árbitro que les toque en el siguiente partido (León-Lobos).

Indicó que si Puente habla de que hay tendencia, deberá presentar muchas pruebas, porque el torneo pasado, en el partido donde a Cruz Azul le marcan dos penales contra Lobos –que causaron polémica–, el árbitro fue el propio Montaño. “Entonces, cuando te favorecen las supuestas fallas ‘el árbitro es humano’, y si les afectan, ‘es incompetente’”.

Lobos, Veracruz, Atlas y Querétaro están involucrados en el descenso y cada derrota aumenta la tensión. Archundia destacó que por ahora el arbitraje mexicano atraviesa por “un cambio generacional; hay árbitros muy jóvenes, pocos internacionales están participando en el torneo por diversas circunstancias.

Todo el peso está cayendo en gente que empieza, pero tienen capacidad, como Fernando Guerrero, quien es el referente; Montaño, Roberto Ríos, Adonai Escobedo, que lo están haciendo bien. Sin duda necesitan un poco de mayor experiencia y la única forma de adquirirla es dándoles partidos, aunque no dejen contentos a todos, finalizó.