Indian Wells.

Juan Martín del Potro salvó tres bolas de partido en el tercer set para imponerse a Roger Federer por 6-4, 6-7 (8/10) y 7-6 (7/2) y consagrarse campeón en Indian Wells, su primer Masters 1000, que redondeó al arrebatar la corona del torneo y propinar la primera derrota del año al número uno del mundo.

El argentino se convirtió en el primer campeón de su país en el torneo del desierto californiano con 42 años de historia. La racha de 107 victorias de Federer, el mejor arranque de temporada de su carrera, llegó ayer a su fin.

Para conquistar su primer título en un certamen de la serie Masters 1000 de la Asociación de Tenistas Profesionales (ATP), Del Potro sobrevivió a duelos contra su compatriota Leonardo Mayer, en la cuarta ronda, y Philipp Kohlschreiber, en los cuartos de final.

Fue su primera victoria contra Federer desde los cuartos de final del Abierto de Estados Unidos del año pasado. Del Potro está en desventaja 18-7 ante el actual número uno del mundo.

El título de Indian Wells es el segundo más importante que obtiene la Torre de Tandil, en una carrera que ha estado marcada por el suplicio de múltiples cirugías en las muñecas. La máxima conquista se dio en 2009, cuando venció a Federer en la final del Abierto de Estados Unidos, su único cetro de Grand Slam.

Sin embargo, ayer ambos ofrecieron un partido en el se combinó la emoción, la adrenalina y el suspenso en casi tres horas de juego, en un estadio con 18 mil 347 personas que impuso récord de asistencia.

Federer, con cinco títulos, tenía en la mira el certamen para seguir dejando huella como el tenista de mayor edad en ganar en el circuito profesional, aunque al final, como reconoció en la ceremonia de premiación, su rival merecía levantar el trofeo y lo hizo el argentino, quien a su vez dijo: todavía estoy temblando, por la intensidad del duelo y la forma en que el suizo responde para levantarse de un marcador adverso.

El tandilense, quien a partir de mañana será sexto del mundo, logró su victoria al límite, la cual dedicó a César, su perro fallecido recientemente. Luego, en español, indicó que este título lo compartía con todo su país.

Un Del Potro muy afilado rompió el servicio del suizo en el quinto juego del partido. A partir de allí mantuvo su saque, pese a la resistencia de Federer, y firmó el primer set con relativa rapidez.

Incómodo, en ocasiones errático, el campeón de 20 Grand Slams no encontró su ritmo y no pudo dictar los tiempos del encuentro, ante un rival que, por el contrario, respiraba calma.

Ambos, en todo caso, protagonizaron intercambios intensos que fueron una formidable exposición de golpes y movimientos: tenis de gran nivel que no defraudó la expectativa generada por un duelo que ya cuenta con varios grandes capítulos, incluyendo el de este domingo.

Porque si en la primera manga Del Potro dominó, la final fue mucho más pareja en la segunda. Cada uno cuidó su servicio y, llegados al tie-break, el partido tuvo más que ver con no errar que con imponer un juego.

Federer, por ejemplo, tuvo cuatro puntos de set antes de igualar las acciones, mientras el sudamericano contó con un punto para partido cuando iba 8-7 arriba. La crispación, entonces, alternaba con momentos de alto vuelo.

En el parcial definitivo, los saques volvieron a imponerse y fue hasta el noveno juego que el suizo rompió el servicio del argentino.

Para ese momento Federer se desenvolvía con más fluidez. Sin embargo, cuando sacaba para el torneo, un soberbio derechazo de Del Potro le quebró el servicio y obligó, dos games después, a un nuevo desempate.

Allí reinó sin discusión Del Potro, quien nada más al empezar propinó dos miniquiebres al suizo y sacó una ventaja ya indescontable, como si Federer, agotado por el enorme esfuerzo o frustrado por las oportunidades perdidas, hubiera desaparecido. No fue el caso del argentino, quien logró un nuevo hito en su ilustre carrera en Indian Wells para anotarse su segundo título de la temporada tras ganar el Abierto Mexicano en Acapulco.

En la final femenina, Naomi Osaka arrasó 6-3 y 6-2 a la rusa Daria Kasatkina, duelo que enfrentó a dos jugadoras de 20 años en plena ebullición, aunque la primera se convirtió en la más joven del certamen por diferencia de 153 días.

Osaka, de padre haitiano y que representa a Japón, conquistó en 70 minutos el primer título de su carrera en uno de los certámenes más importantes de la Asociación de Tenis Femenil, para embolsarse un premio que rebasa los 1.3 millones de dólares, misma cantidad que los varones.

La victoria de Osaka coronó una campaña en la que consiguió triunfos ante rivales de renombre: Maria Sharapova (dos veces campeona en Indian Wells), Karolina Pliskova (quinta de la clasificación) y Simona Halep (número uno mundial). La japonesa ascenderá al puesto 22 en el escalafón a partir de hoy.