El veterano político está citado mañana por el Tribunal Supremo
Jueves 22 de marzo de 2018, p. 30
Madrid.
El presidente del Parlamento catalán, Roger Torrent, convocó este jueves a una sesión de investidura. Los tres partidos independentistas aspiran a elegir a Jordi Turull, veterano político del nacionalismo conservador de la antigua Convergencia Democrática de Cataluña (CDC).
La premura de la convocatoria se debe a la decisión del juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena de citar a declarar como imputado al propio Turull por su participación en el proceso fallido de independencia de octubre pasado.
Tras los comicios del pasado 21 de diciembre, los partidos independentistas abrieron negociaciones para elegir nuevo gobierno, sin obtener resultados. Finalmente ayer se decidió convocar al pleno para investir a Turull con el beneplácito de su propia formación, Junts per Catalunya (34 escaños), y Esquerra Republicana de Catalunya (32), mientras la tercera fuerza soberanista, que será crucial para ganar la votación, la Candidatura de Unidad Popular (con cuatro diputados), anunciará unos minutos antes del pleno
el sentido de su voto, una vez que la figura de Turull no convencía a un amplio sector de la formación anticapitalista.
Torrent explicó que la medida la tuvieron que adoptar ante las injerencias sobre el Parlamento que estamos viviendo
, en alusión a la instrucción del juez Llarena de procesar a Turull por su papel en el proceso independentista, el próximo viernes. El dirigente parlamentario ha insistido en que su objetivo ha sido proteger a la institución y los derechos de los diputados.
El también ex consejero de Presidencia y uno de los principales responsables del referendo del pasado primero de octubre y del proceso fallido de secesión unilateral, está citado a declarar ante el Tribunal Supremo el próximo viernes, en un pleno en el que se podría decidir su reingreso a prisión, por lo que las fuerzas soberanistas intentan adelantarse a esta posibilidad.
Tras los comicios del pasado 21 de diciembre y casi seis meses después de que el gobierno español intervino las instituciones catalanas con la aplicación del artículo 155 de la Constitución, el independentismo catalán pretende así concretar la investidura. La huida a Bélgica del ex presidente y candidato natural a ocupar el cargo, Carles Puigdemont, ha retrasado la formación del nuevo gobierno.
El independentismo había acordado hace una semana que ante la imposibilidad de nombrar a Puigdemont, entonces votarían por la candidatura de Jordi Sánchez, el presidente de la Asamblea Nacional Catalana, quien se encuentra en la prisión de alta seguridad de Soto del Real desde mediados de noviembre y a quien negaron el permiso para acudir al pleno.
La convocatoria precipitada del pleno provocó críticas de las fuerzas unionistas y del propio gobierno español, encabezado por Mariano Rajoy, quien acusó a Torrent de degradar
las instituciones catalanas. Desde Ciudadanos, la principal fuerza del Parlamento catalán –que obtuvo 38 diputados y fue la lista más votada–, se calificó de vergüenza que sigan degradando al Parlamento, utilizándolo como escenario para seguir con el choque y el enfrentamiento
.
La justicia española delibera si envía a la cárcel a Urdangarin
En otro orden, el cuñado del rey Felipe VI, Iñaki Urdangarin, se encuentra en la cuerda floja. El Tribunal Supremo está deliberando si finalmente lo envía a prisión, una vez que se han agotado los recursos y los plazos fijados por la justicia. De hecho, la fiscalía solicitó elevar a 10 años de cárcel la pena impuesta a Urdangarin.
La fiscal Ángeles Garrido ha ido repasando la sentencia y concluyó que los dos principales responsables –Urdangarin y su socio Miguel Torres– llevaron a cabo un acción concertada en la que desarrollaron una secuencia
delictiva que merece, según el criterio del Ministerio Público, una pena mayor a la impuesta por el tribunal de primera instancia.