sabía de amenazas y las subestimó: deudos
Envió mensajes de WhatsApp para tranquilizarla, que desaparecieron cuando fiscalía local recogió celulares
Confirman frase de que ella se lo buscó por pisarle los callos al diablo
, dicha por el mandatario en una reunión
Sábado 24 de marzo de 2018, p. 2
Chihuahua, Chih.
El gobernador de esta entidad, Javier Corral Jurado, tuvo conocimiento de las amenazas de muerte que había recibido la periodista Miroslava Breach Velducea. El 22 de marzo, un día antes de que asesinaran a la corresponsal de La Jornada, el mandatario local la tranquilizó por mensajes de WhatsApp
, pero minimizó las amenazas
, aseguró Brisa Breach, quien también confirmó que durante un encuentro realizado el 3 de enero en el Palacio de Gobierno, Corral Jurado les dijo que su hermana tuvo la culpa de su muerte por pisarle los callos al diablo
.
Asimismo, Jacobo Breach cuestionó al político: “cómo es que usted, señor gobernador, habla de corrupción y encubrimiento de un ex gobernador por parte del gobierno federal , cuando está protegiendo a integrantes de su gabinete y ex alcaldes de su mismo partido que forman parte de la corrupción y narcopolítica de su estado”, todo ello durante los actos que se realizaron como homenaje a la fallecida periodista chihuahuense a un año de su homicidio.
Este viernes, en el monumento conocido como La Cruz de Clavos, donde se ha rendido homenaje a luchadores sociales y activistas que han sido asesinados, desaparecidos o reprimidos en esta entidad, se encontraron ciudadanos, amigos, periodistas y compañeros de Miroslava Breach, y escucharon cuando Brisa señaló: “¡Ella se buscó ser asesinada… al menos desde el punto de vista de la máxima autoridad del estado de Chihuahua! (…) Esa frase dicha por el gobernador es una bofetada para la familia”.
Brisa afirmó que su hermana era una periodista que se exigía valentía y coraje para exponer abusos, despojos, corrupción y narcopolítica, y “ahora resulta que, como muchos otros comunicadores en este país, ¡ella tuvo la culpa de que la asesinaran!
“Según las autoridades ella fue culpable por no voltear a otro lado cuando tuvo ante sí los malos manejos de funcionarios de gobierno y autoridades; que fue irresponsable con su familia por no disfrutar de un hermoso paisaje tarahumara sin fijarse en la deforestación y en el despojo a las etnias, y que tampoco tenía que ser su problema la voracidad y devastación minera y de otros megaproyectos… y menos aún destapar la corrupción y los acuerdos entre políticos y narcos.”
Acompañada de Jacobo y Rosa María, también hermanos de Miroslava, y de Alcira, sobrina de la periodista, Brisa dijo: “qué le hubiera costado ser una periodista miope y chayotera y sólo escribir lo que se le dictaba. Visto de ese modo, sí… ella se lo buscó. ¡Ella se buscó ser asesinada… al menos desde el punto de vista de la máxima autoridad del estado de Chihuahua!”
El 3 de enero de este año, en el despacho del gobernador, Corral Jurado dijo a los familiares de Miroslava que eso le pasó a la periodista por andarle pisando los callos al diablo. El jueves, el mandatario local indicó que ese señalamiento era mentira, no negó la existencia del encuentro, el día, tampoco que ese momento en que la reunión se daba se manifestaban fuera del Palacio de Gobierno unos 200 productores lecheros, tampoco que algunos de sus colaboradores escucharan lo que se dijo en su despacho.
Este viernes los familiares de Miroslava dieron a conocer parte de lo sucedido en ese encuentro, en el cual, afirman, el gobernador les comentó: “ella se lo buscó (…) ‘es que su hermana se dedicó a pisarle los callos al diablo’”.
Brisa hablaba frente a los balcones del Palacio de Gobierno en momentos en que Corral Jurado estaba en el inmueble y, a diferencia de hace un año, cuando muchos funcionarios públicos acompañaron a los periodistas en el acto de protesta por el homicidio, esta vez muy pocos estuvieron allí mientras la hermana de Miroslava decía: “esa es una lamentable opinión… y una de-safortunada declaración de incapacidad y subordinación ante el narcotráfico y la delincuencia.
“Esa frase dicha por el gobernador es una bofetada para la familia, para el gremio periodístico y para cualquier mexicano, porque viene de una autoridad responsable de hacer cumplir los elementales derechos de protección a la vida, de libertad y seguridad a la que tenemos derecho como ciudadanos.
Y pisarle los callos al diablo no sólo es parte de la labor periodística, sino de la sociedad en general, quitarnos la mordaza, levantar la voz, exigir un cambio y enderezar a este pobre país tan lastimado por la violencia, la impunidad y corrupción.
Durante su intervención, Jacobo Breach resaltó que “se cumple un año del cobarde asesinato de Miroslava en el que vemos con impotencia y decepción cómo nuestros dirigentes gubernamentales se evaden para que se haga justicia y se castigue a cada uno de los implicados.
“Sólo se pretende enfocar la responsabilidad en un detenido y en otro que queda prófugo, pero qué hay de quienes están detrás de todo esto, qué hay de aquellos que navegan con bandera de servidores públicos y no son más que unos cobardes corruptos causantes de entregar a nuestra hermana a los criminales para cubrir sus intereses.
“Cómo es que usted, señor gobernador, habla de corrupción y encubrimiento de un ex gobernador por parte del gobierno federal, cuando está protegiendo a integrantes de su gabinete y ex alcaldes de su mismo partido que forman parte de la corrupción y narcopolítica de su estado.
Como decía nuestra hermana Miroslava: el silencio también es cómplice, y si quiere dirigir con dignidad y honestidad este estado, empiece la limpieza con su gente dándoles el castigo que se merecen.
Al concluir el acto, Brisa reveló que un día antes del ataque a Miroslava, la periodista le informó que Corral Jurado ya estaba enterado de que había sido amenazada y que inclusive el mandatario local “por WhatsApp la tranquilizó, luego pasó lo de Miros, los teléfonos se recogieron (por la fiscalía local) y eso (la conversación entre Miroslava y Corral) ya no apareció”. Para Brisa, el gobernador desestimó las amenazas contra Miroslava.
Los hermanos y la sobrina de la periodista, así como un pequeño grupo concluyeron el día visitando la tumba de la corresponsal de La Jornada.