Martes 3 de abril de 2018, p. 2
Washington.
Durante los conciertos las ondas cerebrales de las personas en el lugar se sincronizan y tal vínculo está relacionado con la sensación de disfrutar el espectáculo, señala un estudio publicado este lunes en el portal Science News.
La neurocientífica Jessica Grahn, directora de la investigación, explicó que la música está típicamente relacionada con los rituales, en la mayoría de las culturas se asocia con la danza y por tanto es una forma de tener participación social.
Durante el estudio, los sujetos participantes se dividieron en grupos de 20 y experimentaron música de una de tres maneras.
Unos vieron un concierto en vivo con un gran auditorio, otros la grabación de ese espectáculo y un tercer grupo observó la grabación con sólo unas pocas personas.
En el espectáculo los músicos tocaron una canción original que escribieron para el estudio.
Además, cada sujeto llevó gorras EEG (electro encefalogramas), cubiertas con electrodos que miden el comportamiento colectivo de las células nerviosas del cerebro.
Mediante esa herramienta los investigadores confirmaron que las ondas cerebrales delta de los miembros del auditorio en el concierto estaban más sincronizadas que las de las personas de los otros dos grupos.
Cuanto más sincronizado estaba un miembro del público en particular con los demás, más informaba que se sentía conectado con los artistas y disfrutaba del espectáculo
, detalló el reporte científico.
Otro de los resultados del trabajo fue constatar que las ondas cerebrales delta caen en un rango de frecuencia que corresponde aproximadamente al ritmo de la música, lo cual sugiere que el ritmo impulsa la sincronicidad.