Tras señalar que la incidencia delictiva contra el sector comercial establecido va a la alza en la Ciudad de México y que delitos como el cobro de piso afectan en general a las 16 delegaciones, pero se enfoca principalmente en las delegaciones Cuauhtémoc, Iztapalapa, Iztacalco y Benito Juárez, la presidenta de la Cámara de Comercio Servicios y Turismo en Pequeño (Canacope) de la Ciudad de México, Ada Irma Cruz Davalillo, hizo un llamado a las autoridades locales y federales para que redoblen los operativos de seguridad, refuercen la presencia de policías en las zonas comerciales urbanas y se establezcan estrategias de inteligencia que desactiven e inhiban las prácticas de cobro de piso, amenazas y extorsión a empresarios y negocios.

Para revertir la situación, la ciudad no puede darse el lujo de esperar un cambio de gobierno; se requiere la actuación aquí y ahora, afirmó al presentar un sondeo de opinión sobre la percepción de seguridad en los pequeños comercios de la Ciudad de México.

De acuerdo con el estudio realizado por el organismo, entre 302 comerciantes durante 2017, ocho de cada 10 micro, pequeños y medianos empresarios de la capital del país sufrieron en su persona, familiares o círculo cercano algún acto relacionado con la delincuencia, incrementando la tendencia que en 2016 era siete de cada 10.

En 2017, los principales actos delictivos fueron robo (16 por ciento), pandillerismo (15 por ciento), extorsión (13 por ciento), cobro de piso (11 por ciento), secuestro exprés (9 por ciento), robo hormiga (8 por ciento), amenaza (8 por ciento), violación (6 por ciento), asalto (5 por ciento), secuestro (5 por ciento) y asesinato (4 por ciento).

De los actos delictivos, 60 por ciento de los entrevistados reportan que se usó fuerza excesiva para someter a las víctimas, así como golpes y amenazas. En 40 por ciento se utilizó un arma de fuego o blanca para intimidar, agregó.

De acuerdo con el sondeo, los lugares donde los entrevistados consideran que existe mayor riesgo de sufrir un acto delictivo en la ciudad son las calles solas, avenidas, los cajeros automáticos, la Central de Abasto y los momentos en que se va a surtir el negocio. Actividad que es considerada de riesgo por la vulnerabilidad en la que se encuentra el comerciante al realizar transacciones de compraventa de gran volumen con proveedores y al realizar operaciones en los bancos.

En cuanto al transporte público, los microbuses presentan mayor riesgo para los entrevistados; le sigue el Metrobús, los taxis y estar varado en el tránsito.