Guanajuato, Gto.

El Congreso del estado reformó el Código Penal para castigar hasta con 60 años de prisión a la persona que asesine a un policía o a un funcionario de procuración y administración de justicia.

De 2012 a la fecha, en el estado han sido ultimados 55 policías municipales, estatales, de Investigación criminal y un soldado, según datos obtenidos por acceso a la información.

Los diputados aprobaron adicionar el artículo 141-A que establece penas de 30 a 60 años de cárcel a quien asesine a servidores públicos que desempeñen funciones de seguridad pública, de investigación de delitos, de procuración o administración de justicia en materia penal, de ejecución de penas, de su cónyuge o sus parientes en línea recta o colateral hasta el cuarto grado o con quien viva en concubinato

También se adicionó el artículo 150-a para aumentar las penas por lesiones a servidores públicos y familiares. En la iniciativa original se planteaba una pena de 20 a 40 años, pero en el pleno los diputados decidieron aumentarla.

Cifras refieren que en 2012 fueron asesinados dos policías; en 2013, cinco; en 2014, dos; en 2015, uno; en 2016, 16; en 2017, 12, y en lo que va de 2018, 15, según datos de la Procuraduría General de Justicia del Estado, en respuesta a la solicitud de información 00123618.