Mexicali, BC.

De enero a la fecha 78 mujeres han sido asesinadas en Baja California. El caso más reciente es el de Valeria Ahumada Jáuregui, de 22 años de edad, cuyo cadáver fue localizado la tarde del lunes en un inmueble en construcción en la colonia Lomas de Abasolo.

La mujer era empleada de una tienda en la plaza comercial Carranza y madre soltera de Ivanna Sinnahí, de cinco años. Desapareció el sábado, después de acudir a un convivio en casa de su novio, Sergio Enrique.

El cuerpo fue encontrado con fractura craneoencefálica y lesión de arma blanca en la garganta. Según el Servicio Médico Forense, recibió 22 heridas.

Sus familiares presentaron denuncia ante la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE). Rindieron declaración los invitados al convivio y el chofer del auto de Uber que la joven pidió para que la llevara a su domicilio, en el fraccionamiento Lomas de Alarcón.

Sin embargo, el conductor negó haber hecho el viaje, por lo cual la PGJE ya investiga a Sergio Enrique; además, el forense determinó que hubo manipulación anal y vaginal en el cuerpo de Valeria y peritos identificaron huellas de zapatos y de neumáticos en el inmueble en obra negra donde fue hallada la joven.

La víctima vestía pantalones cortos de mezclilla, licras negras, blusa estampada de colores y sandalias.

La PGJE ha iniciado 78 investigaciones por asesinatos de mujeres: 62 ocurridos en Tijuana, nueve en Mexicali, cuatro en Playas de Rosarito y tres en Tecate.

Marina del Pilar Ávila Olmeda, candidata a diputada federal de la alianza Juntos Haremos Historia, señaló que se debe reforzar la prevención y atender con seriedad las señales de violencia en el noviazgo y la violencia doméstica, ya que en muchas ocasiones anteceden a un asesinato o desaparición forzada.

Por su parte, la coordinadora del movimiento de mujeres del Partido Encuentro Social, Lorena Noriega, exigió al gobernador Francisco Vega activar la alerta por violencia de género en Baja California y advirtió: “No es por su ropa; no es porque caminan de noche. Lo primero que hacen es juzgarlas por ser mujeres.

Somos más las que sentimos miedo de ser asesinadas por el simple hecho de ser mujeres, lo que es probable que siga ocurriendo porque las autoridades no hacen bien su trabajo. Exigimos que nos garanticen seguridad, expresó.