Algunas de las enfermedades que actualmente provocan más fallecimientos en México, como las no transmisibles, podrían controlarse de mejor forma si se invirtiera más en un enfoque preventivo de la salud y en el fortalecimiento del primer nivel de atención hospitalaria, afirmó el subsecretario de Prevención y Promoción de la Secretaría de Salud, Pablo Kuri Morales.

Durante su participación en el último día de actividades del Encuentro de Líderes en Salud, el funcionario indicó que si se fortaleciera el primer nivel de atención hospitalaria, podríamos despresurizar al segundo y tercer nivel, que en la actualidad siguen acaparando la mayor parte de los fondos para temas sanitarios.

“Desde el primer nivel de atención se podría controlar a la diabetes y a la hipertensión, que son los principales ‘sobrecargadores’ del presupuesto de salud”, afirmó Kuri.

En ese sentido, el subsecretario advirtió que aunque las instituciones de salud en México han logrado hacer bajar la prevalencia de diabetes en los años recientes, dicha enfermedad sigue causando alrededor de 105 mil fallecimientos al año, sin que este tema genere ya mucha atención pública.

De las 10 enfermedades que hoy provocan más fallecimientos en el país, sólo una es de carácter infeccioso, y las demás son por dolencias no transmisibles, como diabetes e hipertensión, o por accidentes.

Sin embargo, esta transición epidemiológica ha hecho que las muertes por diabetes u otras enfermedades derivadas del sobrepeso ya no generen tanta atención del púbico y de los medios, como sí la provocan las epidemias de males infecciosos.

Pese a la gravedad del tema, Kuri destacó que ha habido avances importantes en el combate a las dolencias por el sobrepeso, como demuestra el que la prevalencia de diabetes en 2016 fue de 9.4 por ciento de la población general, en vez de 10.4 por ciento que se esperaba, según estudios oficiales.

En ese foro, el titular del Seguro Popular, Antonio Chemor Ruiz, destacó que las reformas de 2014 a la Ley General de Salud facilitaron que hoy existan mayores candados para evitar malversaciones de los recursos del programa que dirige.

Si los gobiernos estatales no entregan a tiempo su reporte de gastos de los recursos federales para el Seguro Popular –la fecha límite es el 30 de abril– el gobierno puede retenerles los fondos del periodo siguiente. Lo anterior, recalcó, ha ayudado a que las entidades federativas no se retrasen y eviten cualquier posible acto de malversación de dinero.