Guadalajara, Jal.

El equipo de Guadalajara quiere terminar la obra que comenzó en Canadá y hacer historia en la Liga de Campeones de la Concacaf, esta noche en el partido de vuelta de la final ante Toronto FC, que está obligado a ganar al menos por dos tantos.

El cuadro que dirige Matías Almeyda saldrá a su cancha con ventaja de 2-1 y deberá hacer lo suficiente, incluso tiene margen de perder 0-1, porque prevalece el gol de visitante como criterio de desempate.

El club mexicano dio un golpe que parece letal rumbo al cetro de la Concachampions, pero no puede caer en exceso de confianza que ponga en peligro la obtención del título del futbol regional, que no consigue desde que fue el primer monarca, en 1962, en la entonces llamada Copa de Campeones de Concacaf. Esa ocasión se impuso al Comunicaciones, de Guatemala.

Las Chivas llegan a esta final con tensión entre plantel y directiva, lo que quedó demostrado el pasado sábado, cuando los jugadores dejaron en claro que darán la cara por ellos y por la afición, pese a que les adeudan los premios por el título de Copa Mx y del torneo Clausura 2017.

De coronarse, el Rebaño irá al Mundial de Clubes, a realizarse en Emiratos Árabes Unidos.