Los cárteles mexicanos que operan en la región noroeste del país, conformada por Baja California, Sinaloa, Baja California Sur, Sonora y Chihuahua, han utilizado armas fabricadas en 12 países, revela un informe elaborado por la Procuraduría General de la República (PGR).

De 2006 a marzo de 2018 la PGR decomisó 188 mil armas de distinto calibre. De ese total, 87 mil fueron rastreadas durante seis años (2010-2016) para identificar su origen, ruta de introducción y compradores.

Para ello utilizó el sistema E-Trace, base de datos de la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos de Estados Unidos, a la que tiene acceso la PGR para generar mapas en el combate al crimen organizado.

Por medio de la Agencia de Investigación Criminal (AIC), la dependencia dio seguimiento a mil 798 armas en 2010, 18 mil 678 en 2011 y 19 mil 397 en 2012. En 2013, 11 mil 103, 12 mil 224 en 2014 y 15 mil 706 en 2015. De enero a septiembre de 2016 fueron 8 mil 187.

La Jornada tuvo acceso al informe Panorama de la delincuencia organizada en la región noroeste, elaborado por la AIC, en el cual detalla los resultados.

De diciembre de 2012 a agosto de 2016 fueron rastreadas en la región 8 mil 98 armas de fuego; el mayor movimiento de armamento ocurrió en Chihuahua, donde alcanzó su punto más alto en 2014.

En 2015 y 2016 fue Sinaloa la entidad donde se movilizaron más armas de distintos calibres. El informe indica que dos fueron distribuidas por autoridades mexicanas para conocer su destino final y las ubicaron en Chihuahua; sin embargo, el texto no ofrece más detalles.

Se tuvo conocimiento de que el crimen organizado en la zona noroeste utilizó armamento que fue fabricado en Estados Unidos, Italia, Rumania, Alemania, Bélgica, Austria, China, España, Hungría, Polonia, Serbia y Montenegro.

Se identificó que los estados del país vecino del norte que proveen mayor cantidad de armas en dicha región son: Arizona, Kentucky, California, Texas, Connecticut, Carolina del Norte, Georgia, Indiana, Massachusetts, Minnesota y Nevada.

Derivado de los decomisos por la PGR, la zona centro –estado de México, Hidalgo, Ciudad de México, Morelos, Tlaxcala y Puebla– es la región con más decomisos entre 2006 y 2018, con un total de 110 mil.

En la zona noroeste, que disputan el cártel de Sinaloa, con sus escisiones, parte de los Beltrán Leyva y Jalisco nueva generación, se incautaron 22 mil 755 armas largas y cortas.

En lo que respecta a la región occidente –Nayarit, Jalisco, Aguascalientes, Guanajuato, Querétaro, Colima y Michoacán–, que domina el cártel Jalisco nueva generación, de Nemesio Oseguera Cervantes, El Mencho, la PGR decomisó 21 mil 175.

En la región noreste –Coahuila, Durango, Nuevo León, Zacatecas, San Luis Potosí y Tamaulipas– se decomisaron 18 mil 284. A esa cifra se suma la incautación de un arsenal por militares en Nuevo Laredo, hace unos días, en la que se contaron 206 armas largas, 14 cortas, dos fusiles Barret, un lanzacohetes RPG, 10 granadas, más de 5 mil cargadores y 185 mil cartuchos.

Entre éstas destaca un fusil AK-47 con baño de oro.

De acuerdo con los primeros reportes, el armamento pertenecía al cártel del Noreste.

Por último, en la zona sureste, que conforman Guerrero, Oaxaca, Veracruz, Chiapas, Tabasco, Campeche, Quintana Roo y Yucatán, se decomisaron 16 mil 400 armas de distinto calibre.