Los operadores de trenes en Francia comenzaron ayer una huelga en protesta por los planes del gobierno del presidente Emmanuel Macron de reestructurar la empresa ferroviaria nacional (SNCF). Los sindicatos convocaron a una protesta en el centro de París para ejercer presión sobre la administración antes de un encuentro con el primer ministro Edouard Philippe la semana entrante. La renovación incluye la eliminación del estatus especial del que gozan los conductores, que les garantiza empleo y prestaciones de por vida. El gobierno dice que las reformas son necesarias para abrir el sector a la competencia extranjera. La policía tomó posiciones en París ante posibles protestas violentas. Con información de Ap y Pl