En la Plaza de la República el Partido de la Revolución Democrática (PRD) celebró 29 años y lo hizo mostrando su músculo en el bastión más importante de su historia: la Ciudad de México. Su legión de corrientes movilizaron a miles de personas que escucharon al panista Ricardo Anaya prometer que ganará la Presidencia de la República.

La maquinaria de organización y control que el partido del sol azteca ha construido durante casi 30 años en la capital del país se hizo sentir ayer en el centro de la ciudad: el templete instalado a lo ancho de la bocacalle de la Avenida de la República congregó a su alrededor a un río de mujeres y hombres que desde distintas partes del área metropolitana y de estados como Morelos, Guerrero, Oaxaca y de México fueron transportados para que junto a los dirigentes de ese instituto político festejaran casi tres décadas de participar –desde diversas trincheras– en el sistema de partidos.

Hasta ese sitio llegaron los candidatos de la coalición Por México al Frente: Ricardo Anaya Cortés para la Presidencia de la República y Alejandra Barrales al gobierno de la capital del país. Asimismo, asistieron el dirigente nacional perredista, Manuel Granados, y los líderes –de una década a la fecha, cuando comenzó a desgranarse y a ser controlado por la corriente de los chuchos– de ese partido, entre quienes se encontraban Miguel Ángel Mancera, Jesús Ortega, Héctor Serrano, Héctor Bautista, Mauricio Toledo y Roberto López.

A decir de los organizadores, acudieron 50 mil personas al Monumento a la Revolución. No obstante, la policía capitalina estimó que fueron movilizadas entre 18 y 20 mil personas. La mayoría eran familias y trabajadores adscritos a las distintas instancias de gobierno que controla el PRD y los bomberos.

En su alocución, Alejandra Barrales fustigó a los desleales que se fueron del PRD: “La Ciudad de México es una ciudad que hemos gobernado de manera ininterrumpida durante 20 años y vamos a volver a ganar la jefatura de Gobierno… A quienes se fueron se los agradecemos, porque nos quedamos los leales a los principios perredistas”.

En tanto, Ricardo Anaya se ajustó al script y ponderó los 29 años de existencia del partido del sol azteca y su contribución sustantiva a la democracia y a las libertades, no sólo en la ciudad, sino en el país entero.

Con elevado tono de voz, Manuel Granados acusó a Andrés Manuel López Obrador de pretender instaurar un gobierno autoritario que elimine las libertades que tanto han costado al país: El PRD actuará con inteligencia, ante la corrupción con transparencia y ante la impunidad con justicia.

También coincidió con Anaya al sostener que la del PRD, Acción Nacional y Movimiento Ciudadano es la única coalición que va subiendo en la intención de voto a escala nacional y que ya empató en primer lugar en la Ciudad de México.