La Academia Sueca anunció ayer la separación formal de cuatro integrantes.

Lotta Lotass, Klas Östergren y Sara Stridsberg pidieron y obtuvieron con efecto inmediato la autorización de dimitir de la Academia Sueca, difundió la institución en un comunicado.

También aceptó la dimisión de Kerstin Ekman, retirado desde 1989 después de la negativa de la Academia Sueca a repudiar una fatwa (condena a muerte) contra el escritor indo-británico Salman Rushdie, autor de Los versos satánicos.

Ese cuerpo colegiado está inmerso en una crisis luego de las revelaciones del movimiento #MeToo que la salpicaron a finales de 2017.

En las recientes semanas, seis de los 18 académicos anunciaron su renuncia al sillón. Dos miembros no participaban desde hace mucho tiempo en su trabajo, reduciendo a 10 el número de colgiados en activo.

Además, la ex secretaria permanente Sara Danius, Katarina Frostenson, Peter Englund y Kjell Espmark anunciaron su alejamiento de la Academia, la cual no ha informado alguna toma de posición en torno a esas dimisiones.

Adición del rey sueco a las reglas de la institución

Según los estatutos de esa institución fundada en 1786, el nombramiento de sus integrantes tenía carácter vitalicio y sólo tras el fallecimiento de un ocupante de las 18 sillas podría ser sustituido, con la votación de al menos 12 académicos activos.

El rey Carlos XVI Gustavo anunció el pasado miércoles una adición a las reglas de esa institución: sus miembros podrán renunciar y, por tanto, ser remplazados en vida.

El viernes pasado, la Academia anunció que el galardonado con el Nobel de Literatura de 2018 se designaría y anunciaría a la vez que el de 2019, por primera ocasión en casi 70 años.

(Con información de agencias)