La Habana.

Un Boeing 737-200 arrendado por Cubana de Aviación, con seis tripulantes mexicanos y 104 pasajeros a bordo, se estrelló al mediodía de este viernes después de despegar del aeropuerto capitalino José Martí con destino a la ciudad oriental de Holguín, en el vuelo DMJ 0972.

Aunque aún no hay un reporte oficial de víctimas, el diario Granma y la cadena estatal Cubadebate informaron, sin dar más detalles, que sólo tres mujeres sobrevivieron y se encuentran en estado crítico. Especificaron que viajaban 104 pasajeros, de los cuales cinco eran ciudadanos extranjeros y el resto eran cubanos. Añadieron que el gobierno decretó dos días de luto nacional.

La cancillería de Argentina difundió que dos de sus connacionales fallecieron en este incidente, mientras la empresa mexicana Aerolíneas Damojh –con sede en Guadalajara–, propietaria de la nave, precisó que iban seis tripulantes.

Varios testigos vieron que el avión perdía altura hasta estrellarse en un área de cultivos agrícolas en el municipio de Boyeros, que queda muy cerca de la terminal uno del aeropuerto José Martí. Iba a mi casa; vi el avión y que el piloto maniobraba hacia la derecha, perdió altura y fue para abajo. La explosión estremeció todo, relató Yasniel Díaz, de 21 años.

Inmediatamente una horda de médicos, elementos de la policía nacional revolucionaria, miembros del cuerpo de bomberos y cientos de voluntarios acudieron al punto del siniestro, mientras ambulancias y patrullas transitaban a gran velocidad para atender la emergencia.

Las tres sobrevivientes en estado crítico, de las cuales se desconoce la nacionalidad, fueron trasladadas al hospital Calixto García, situado en el centro de La Habana. Yosmany López, esposo de Emiley Sánchez, una de las sobrevivientes, esperaba que se pudiera recuperar de los traumatismos craneales y las quemaduras en 30 por ciento del cuerpo porque está muy grave. Los médicos del hospital y las autoridades no habían podido identificar en la tarde a las otras dos sobrevivientes.

Reacción inmediata

Alicia León, del policlínico de Boyeros, contó: Esto me impactó muchísimo. Vi que nuestros médicos acudieron rápido. Yo llegué a entubar a una sobreviviente, una mujer. No pudimos identificarla. Llegamos enseguida.

Es muy doloroso arribar a este lugar y ver los cadáveres, explicó José Luis Castellano, otro de los médicos rescatistas que ayudó en la clasificación de los muertos.

Algunos familiares fueron trasladados a la terminal aérea. Beatriz Pantoja, cuya hija Leticia, de 24 años, estaba en el avión, lloraba y gritaba en una sala de espera, al tiempo que era atendida por enfermeros.

El nuevo presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, acudió a la zona para supervisar las tareas de rescate y brindó el apoyo del gobierno a las víctimas. Además anunció la formación de una comisión gubernamental para investigar el incidente. En tanto, el ex mandatario Raúl Castro Ruz, quien se recupera de una cirugía de hernia, expresó sus condolencias a los familiares de las personas que fallecieron.

El primer vicepresidente cubano, Salvador Valdés, se reunió el pasado jueves con los jefes de Cubana de Aviación para discutir quejas sobre su servicio. Los problemas incluyen la cancelación de numerosos vuelos nacionales este año y demoras que según la empresa fueron por problemas técnicos.

En meses recientes la empresa retiró varios de sus aviones viejos debido a problemas mecánicos, por lo que subcontrata a otras compañías para operar sus rutas.

Los accidentes aéreos no son habituales en Cuba; uno de los más recientes ocurrió el 29 de abril de 2017, cuando un avión de transporte de las fuerzas armadas se estrelló con ocho militares a bordo. El AN-26, de fabricación rusa, chocó con una pequeña montaña a unos 90 kilómetros al oeste de La Habana.

El más grave ocurrió en septiembre de 1989, cuando un avión modelo Ilushin 62 con destino a Milán cayó en La Habana poco después de despegar con 115 pasajeros más 11 tripulantes.

La comunidad internacional, principalmente los países de América Latina, expresaron profundo pesar por el accidente y brindaron apoyo al gobierno cubano para la atención a las víctimas.

Profundamente consternados por el accidente en Cuba del vuelo DMJ 0972 de la compañía mexicana Damojh que hacía recorrido desde La Habana a Holguín, escribió el presidente de Bolivia, Evo Morales, en su cuenta de la red social Twitter.

El mandatario de Venezuela, Nicolás Maduro, tuiteó: Nuestra palabra de condolencia a los familiares de las víctimas del fatal accidente aéreo de hoy en La Habana. Fortaleza y paz para ellos en este momento de dolor, tengan todo nuestro apoyo.

El presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, comentó en la misma red social: nuestras más profundas condolencias para las familias de los fallecidos en el accidente aéreo ocurrido en Cuba; el pueblo hondureño los acompaña en esta difícil situación.

A ellos se sumaron los gobiernos de México, Argentina, Colombia, Ecuador, Nicaragua, Costa Rica, Paraguay, Panamá, España y Rusia, entre otros.