Domingo 20 de mayo de 2018, p. 29
Tapachula, Chis.
En los cinco años recientes, desde la reaparición de la plaga de la roya –hongo que se adhiere al cafeto y provoca caída de hojas de manera prematura, reduciendo la productividad del árbol hasta en un 50 por ciento– productores de café del sector social de Chiapas registraron pérdidas hasta de 90 por ciento.
Aunado a ese problema, caficultores de las regiones Soconusco, Sierra y Centro padecen los efectos del cambio climático, que ha alterado los ciclos del grano, debido a heladas, vientos en periodos de floración, sequías y sobrerradiación.
En la entidad se cultiva café en 89 de un total de 125 municipios. El promedio de tenencia es de apenas 1.3 hectáreas por productor. La productividad ronda los cinco quintales (300 kilogramos aproximadamente); 60 por ciento de productores pertenecen a alguna etnia.
El desplome de los precios del grano, la infestación del hongo de la roya y el creciente aumento de la pobreza, así como la falta de apoyos gubernamentales (primero por cambio de funcionarios en la Secretaría de Agricultura, y ahora por la veda electoral), ha ocasionado un incremento sin precedentes en el flujo migratorio hacia el norte del país.
Especialistas advierten que es posible que ésta sea la última generación de cafetaleros sociales en Chiapas
.